Caso Lucas González: la madre del joven pidió prisión perpetua para los policías implicados
Con la presencia de cientos de personas frente a Tribunales, se realizó una marcha para reclamar justicia por Lucas González, el adolescente de 17 años que murió tras ser baleado por policías de la Ciudad.
Allí, jóvenes y familias enteras -muchas de ellos llegaron en micro desde Florencio Varela, lugar donde vive la familia de González- se concentraron con carteles que reclamaban "Justicia por Lucas" y pedían "Basta de Gatillo Fácil", a la espera de la palabra de los padres del adolescente asesinado sobre el escenario montado frente a la entrada principal de los tribunales.
"No tengo palabras de agradecimiento para todos los que se acercaron. Le pido a Lucas que no me abandone para darle fuerzas a mi familia. Yo pido justicia para mi hijo, no quiero venganza. Esto no es política, no es grieta", dijo Mario González, el padre del adolescente asesinado, quien estuvo acompañado en el escenario por los jóvenes que estaban junto a su hijo al momento del asesinato.
A su turno, Cintia López, la madre del menor, recordó cómo fueron las últimas horas compartidas con Lucas y sentenció: "A mi hijo me lo acribillaron".
"Lo único que él quería era llegar a Primera. No saben lo difícil que es llegar a mi casa, buscarlo por todos lados y no encontrarlo. Él era mi compañero, mi amigo, mi todo. Y ayer lo tuve que enterrar. Yo estoy muerta en vida", expresó entre lágrimas la mujer. "Le pido al juez que le dé perpetua a los tres policías, porque los tres son culpables", agregó.
Algunos conocidos de las víctimas vestían remeras blancas con la cara de Lucas y una leyenda en el frente que reclamaba Justicia y otra en la espalda que decía "Mi cara, mi ropa y mi barrio, no son delitos".
También, portaban carteles con la leyenda: "Los policías no combaten los crímenes porque están ocupados en cometerlos".
"Esta gente son delincuentes que trabajan con ropa de policía. No puede volver a pasar algo así, basta. Cuatro nenes que salen de entrenar... no puede pasar eso, no puede pasar nunca más, nunca más un Lucas", pidió Javier Salas, papá de Julián, uno de los jóvenes que viajaban en el auto baleado por los policías.
Desde el escenario, y profundamente conmovido, el propio Julián dijo: "Les quiero decir gracias por venir. Mi amigo era humilde y buen pibe, a mi amigo no me lo devuelve nadie. A Lucas le sacaron el sueño, él sólo quería jugar en primera como todos nosotros".
El primero y el último en tomar la palabra durante el acto fue el abogado de la familia, Gregorio Dalbón, quien apuntó contra la Justicia por las demoras en la causa y contra algunos políticos a los que, sin nombrarlos, acusó de querer "utilizar políticamente" el crimen del adolescente.
"No nos importa el uso político de esta causa, no van a usar a este abogado ni van a usar a estas familias. Acá lo que importa es condenar judicialmente a los asesinos de Lucas. No tienen dignidad quienes utilizan la muerte para hacer política, ni los propios ni los ajenos, no se confundan ni con este abogado ni con esta familia, con nosotros no", dijo Dalbón.