La Justicia argentina aceptó el pedido de incautación del avión venezolano por EE. UU.
El juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, hizo lugar al pedido de los Estados Unidos de incautar el avión venezolano retenido en Argentina desde junio. El Departamento de Justicia estadounidense había presentado la solicitud ante la Justicia argentina a principios de agosto.
El pedido del organismo judicial respondía a la resolución de un tribunal de Columbia. El 19 de julio pasado esa corte dictó la orden alegando que "el avión fabricado en Estados Unidos está sujeto a decomiso en base a violaciones de las leyes de control de exportaciones".
Ahora, el magistrado argentino resolvió acatar el pedido en el marco del Tratado de Asistencia Jurídica Mutua en Asuntos Penales con Estados Unidos aprobado por la ley 24.034, según informaron fuentes judiciales. El avión, que permanece en el aeropuerto internacional de Ezeiza, quedará en la Argentina a disposición de la justicia local y de la de Columbia.
El reclamo de Venezuela
La fiscal federal de Lomas de Zamora, Cecilia Incardona, dictaminó que el pedido de la Justicia de EE.UU era "formalmente procedente", dejando así la decisión final en manos de Villena. Previo a la resolución, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela había criticado en duros términos a la magistrada.
Como reacción ante la validación de la fiscal, una comisión especial de la Asamblea Nacional oficialista, encabezada por el diputado Pedro Carreño, reclamó ante la Embajada de Argentina por el avión de carga venezolano.
En tanto, la Procuración General de la Nación (PGN), a cargo de Eduardo Casal, envió una nota a la cancillería argentina para expresar su "profunda preocupación institucional".
La solicitud del Departamento de Justicia estadounidense
A principios de agosto el Departamento de Justicia de Estados Unidos solicitó a las autoridades argentinas la incautación del avión de la empresa Emtrasur retenido en el país desde junio. El pedido se dio a conocer a través de un comunicado en el que se indicó que la corte del Distrito de Columbia había dictado la orden para incautar la nave el 19 de julio.
De acuerdo a la información difundida, la resolución judicial de ese tribunal se basó en que "el avión fabricado en Estados Unidos está sujeto a decomiso en base a violaciones de las leyes de control de exportaciones".
Se consideró, por lo tanto, que la transferencia del avión de Mahan Air a la firma venezolana Emtrasur no estaría autorizada. Emtrasur es, a su vez, subsidiaria de la empresa estatal Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos, S.A (Conviasa).
Además de denunciar la supuesta ilegalidad de la transacción, el comunicado vinculaba a Mahan Air al Hezbollah y a la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC-QF), una organización sindicada como terrorista por los Estados Unidos.
"Trabajando con nuestros socios en todo el mundo, no daremos cuartel a los gobiernos y entidades patrocinadas por el Estado que buscan evadir nuestras sanciones y regímenes de control de exportaciones al servicio de sus actividades malignas", sostuvo el el Secretario de Justicia Auxiliar Matthew G. Olsen de la División de Seguridad Nacional del órgano judicial estadounidense.
La acusación a la aerolínea Mahan Air
En el texto difundido se señaló que en 2008 el Departamento de Comercio de Estados Unidos emitió una "orden de denegación temporal" que prohíbe a Mahan Air participar en cualquier transacción que involucre cualquier producto exportado de los Estados Unidos.
Con base en esta medida, que fue renovada periódicamente desde su vigencia, la justicia de EE.UU advierte que alrededor de octubre de 2021, Mahan Air violó la Orden de Denegación Temporal y las leyes de control de exportaciones de EEUU al "transferir la custodia y el control de la aeronave Boeing a Emtrasur sin la autorización del gobierno" de ese país.
La acusación de la justicia estadounidense agrega que entre febrero y mayo de 2022 se produjeron "violaciones adicionales" de las leyes de control de exportaciones. Se refiere a cuando Emtrasur "reexportó la aeronave entre Caracas, Venezuela; Teherán, Irán; y Moscú, Rusia, sin la autorización del Gobierno de los Estados Unidos", según detalla en el comunicado.
También se señala que "la Policía argentina registró la aeronave y encontró un registro de vuelo de Mahan Air que documentaba los vuelos de la aeronave después de la transferencia ilegal a Emtrasur, incluido un vuelo a Teherán, Irán, en abril de 2022".
Israel reconoció el accionar de Argentina
A diez días del aterrizaje en Ezeiza, el Estado de Israel expresó preocupación por el avión iraní-venezolano y destacó la respuesta de las autoridades de Seguridad de Argentina.
En un comunicado difundido por su embajada en el país, Israel reconoció el "accionar rápido, efectivo y firme" para identificar una potencial amenaza de la nave que transportaba a "un alto funcionario de la fuerza aéra persa Qeshm Fars Air".
"El Estado de Israel está particularmente preocupado por la actividad de las compañías aéreas iranies Mahan Air y Qeshm Fars Air en América Latina, empresas que se dedican al tráfico de armamento y al traslado de personas y equipos que operan para la Fuerza Quds, las cuales están sancionadas por Estados Unidos por estar involucradas en actividades terroristas", expuso el organismo diplomático este jueves.
En referencia a los atentados terroristas perpetrados por Irán en 1992 y 1994 en suelo argentino, la Embajada de Israel manifestó, además, que "la postura firme de Argentina constituye un mensaje importante a Teherán para que no vuelva a intentar actuar en suelo argentino ni en ningún otro país de la región".
La mención a la Fuerza Quds iraní
En el texto difundido a luego de la llegada del Boeing 747 perteneciente a la empresa venezolana EMTRASUR, la embajada israelí sostuvo:
"Los hechos recientes dan cuenta de los intentos sostenidos de la República Istámica de Irán, a través de la Guardia Revolucionaria y la Fuerza Quds, para continuar consolidando su influencia en todo el mundo, incluso en Sudamérica, como base para acciones terroristas en el continente".
En ese sentido, planteó que la situación "se suma a otras operaciones registradas en los últimos meses como el intento de asesinato de ciudadanos israelíes en la ciudad de Bogotá por parte de criminales que trabajaban para la Fuerza Quds en Colombia".