Federico Delgado y el debate por "los sótanos de la democracia"
El fiscal federal Federico Delgado consideró que el contenido de los presuntos chats entre Marcelo D'Alessandro y Silvio Robles "no se puede negar" aunque "no conozcamos la fuente".
En una entrevista con Patricia Blanco en Redacción IP, el abogado y funcionario analizó las causas y efectos de las relaciones entre el poder político, judicial y de inteligencia.
En el video, la charla completa.
La filtración de los mensajes que habrían intercambiado el colaborador del juez Horacio Rosatti y el ministro de Seguridad de CABA llevó a este último a tomarse licencia. En este sentido, Delgado planteó que la duda sobre la veracidad de ese material "se soluciona mirando los aparatos".
Credibilidad del sistema judicial
La polémica por la filtración motivó la presentación del juicio político contra los jueces de la Corte Suprema, iniciado por el presidente, Alberto Fernández, y 11 gobernadores. El procedimiento apunta a que el Congreso habilite una investigación sobre el desempeño de los integrantes del máximo tribunal.
"El juicio politico es la única forma saludable que tienen los jueces de la Corte de rendir cuentas a la república democrática", consideró Delgado.
Y agregó: "No podemos vivir con un sistema judicial con esas patologías. Eso incide en le precio de la luz, de internet, en los mercados cartelizados, y afecta al jubilado, al trabajador. Lo mínimo que merece es un poco de franqueza en nuetsras élites políticas y económicas, para que se sienten a pensar como componer algo que evidentemente está descompuesto".
El debate por los "sótanos de la democracia"
En otro momento de la charla, el abogado y politólogo señaló que en Argentina "se hace politíca usando la información como insumo". Siguiendo esa idea, valoró que la gestión de Gobierno nacional haya prohibido "que los espías trabajen de policías".
"El lenguaje de los policías es el de la ley, y el de los espías es el del secreto, casi al margen de la ley. Y asi se armaban causas, pasaban cosas espantosas, porque a veces los jueces convocaban a los espías para que los auxilien, y eso terminaba casi siempre mal. Creo que el caso AMIA es el mas representativo de todo eso", desarrolló.
Por último, consideró que se trata de "poderes ocultos que están debajo del piso, pero permanecen, más allá de quien gane las elecciones". "Terminar con eso requiere un compromiso público, democrático, de todas las fuerzas políticas", concluyó.