Seguridad: el PRO retoma el debate por el uso de las pistolas Taser
Funcionarios del gobierno de la ciudad de Buenos Aires (CABA) y referentes de Juntos por el Cambio (JxC) retomaron el debate por el uso de pistolas Taser luego del asesinato de Maribel Nélida Salazar, la oficial de la Policía de la Ciudad atacada en la terminal de Retiro.
Las críticas opositoras apuntaron al gobierno del Frente de Todos (FdT) por no habilitar el uso de armas de descarga eléctrica como parte del equipamiento policial.
El primero en mencionar el asunto fue el ministro de Seguridad de CABA en licencia, Marcelo D'Alessandro. A través de Twitter, el funcionario suspendido de su cargo desde enero por la filtración de chats con el judicial Silvio Robles consideró que las Taser son una "herramienta clave para cuidar a la gente".
"El enfrentamiento podría haber sido controlado con una pistola Taser. Hace dos años compramos 60 unidades, pero el gobierno kirchnerista las bloqueó con el festival de excusas truchas que usan para defender delincuentes", acusó D'Alessandro.
Las pistolas a las que hizo referencia el titular de la cartera porteña fueron adquiridas por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en 2020. Su uso había sido habilitado por una resolución emitida por Patricia Bullrich en su rol de ministra de Seguridad, durante el mandato presidencial de Mauricio Macri.
El secretario de Asuntos Públicos porteño, Waldo Wolff, respaldó el reclamo al señalar que "para que esto deje de ocurrir la burocracia gubernamental debe aprobar urgente la entrada de pistolas Taser".
En la misma línea se expresó el diputado nacional de Republicanos Unidos, Ricardo López Murphy, quien sostuvo que "con una Taser, pudo haberlo reducido pero este modelo anti-policía nos sigue costando vidas".
La respuesta del FdT
La legisladora porteña del FdT, Claudia Neira, respondió a los planteos del PRO y JxC al señalar que el debate por el uso de estas armas debe darse "seriamente, en el marco de una política de Estado".
En ese sentido, acusó al oficialismo porteño de "echar culpas y deslindar responsabilidades cuando ocurre un hecho" en un caso que se dio en "jurisdicción de la Ciudad". Además, remarcó que la discusión es "absurda" porque se reduce a solo 60 armas.
Por otra parte, señaló que no se pone en cuestión el uso de otras armas no letales como el gas pimienta, que "podrían tener" los efectivos policiales "que andan en la calle".
Qué dicen los organismos internacionales
Las pistolas Taser provocan una descarga eléctrica de 400 volts que inmoviliza durante cinco segundos a quien recibe el disparo.
En 2007, el Comité contra la Tortura de la ONU las calificó como provocadoras de "un dolor intenso" e indicó que constituyen "una forma de tortura", además de que "en algunos casos puede causar la muerte".
Un informe elaborado por Amnistía Internacional (AI) en 2012 indicó que de los 334 fallecidos en Estados Unidos por el uso de las Taser entre 2000 y 2007, sólo 33 portaban armas y sólo 4 eran de fuego.
En 2008, la cifra de muertos creció a más de 500, con "uso indebido de la fuerza" y "múltiples descargas" como motivo identificado en decenas de casos.