Uganda criminaliza la homosexualidad con una ley que incluye la pena de muerte

El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, promulgó una ley que criminaliza las relaciones entre personas del mismo género. Organizaciones de derechos humanos y gobiernos occidentales repudiaron la norma.

El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, promulgó una ley que criminaliza las relaciones entre personas del mismo sexo, llegando a penar con la muerte en casos que involucren a personas infectadas con VIH y menores de edad.

"Como Parlamento de Uganda, tomamos en cuenta las preocupaciones de nuestro pueblo y legislamos para proteger el carácter sagrado de la familia (...). Nos mantuvimos firmes para defender la cultura, los valores y las aspiraciones de nuestro pueblo", afirmó la presidenta del cuerpo legislativo, Anita Among

Una de las últimas modificaciones del texto que instrumenta la ley afectó a la tipificación criminal, que pasó de la prohibición por "ser homosexual" a penar las relaciones del mismo género. De esta manera, la orientación sexual no se considera delito, pero los vínculos pueden ser castigados con prisión perpetua.

Asimismo, la "homosexualidad agravada", que incluye casos de relaciones sexuales que involucren a personas infectadas con VIH y menores prevé la pena de muerte. El "intento de homosexualidad agravada" se castiga con una pena de hasta 14 años de prisión.

Por otra parte, las organizaciones acusadas de incentivar las relaciones entre personas del mismo sexo pueden ser prohibidas durante diez años, según indica la norma.

Advertencias internacionales 

La normativa aprobada el 21 de marzo por el Parlamento del país africano es una de las más represivas del mundo, y fue repudiada por organizaciones humanitarias y gobiernos occidentales.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, expresó su "consternación" por la promulgación de la ley y afirmó que la misma se opone "a la Constitución y los tratados internacionales" y da lugar a futuras "violaciones sistemáticas de los derechos de las personas LGBTIQ+".

Desde Amnistía Internacional la norma fue calificada como "profundamente represiva" en su etapa de debate. En un comunicado conjunto, el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida y el  Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH advirtieron que "el progreso de Uganda en su lucha contra el VIH está seriamente comprometido".

Sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea

El presidente de Estados Unidos (EE.UU), Joe Biden, dijo después de la promulgación que la ley constituye una "trágica violación" de los derechos humanos y pidió por su derogación. En esa línea, el mandatario solicitó al Consejo de Seguridad Nacional que analice "los compromisos de EE.UU. con Uganda en todos sus aspectos". 

Desde la Casa Blanca informaron que Washington estudiará la posibilidad de imponer sanciones a Uganda y restringir la entrada al país de ugandeses implicados en abusos contra los derechos humanos o corrupción.

Por su parte, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, calificó a la medida de "deplorable".

"La promulgación de la ley contra la homosexualidad por el presidente ugandés Yoweri Museveni es deplorable. Esta ley es contraria a los derechos humanos. El gobierno ugandés tiene la obligación de proteger a todos sus ciudadanos y hacer valer sus derechos fundamentales. Si no lo hace, pondrá en juego las relaciones con sus socios internacionales", escribió el funcionario en Twitter.