Indagan a la azafata acusada de amenaza de bomba a un avión de Aerolíneas Argentinas

La Justicia citó a indagatoria a la mujer imputada por el delito de “intimidación pública y entorpecimiento de los servicios públicos" y "coacción agravada" contra el piloto. “Decile al capitancito que le pusimos tres bombas en el Miami", había dicho en la intimidación.

El Juzgado Federal Nº 1 de Lomas de Zamora, citó a indagatoria a la azafata Daniela Carbone, por haber realizado una amenaza de bomba a un avión de Aerolíneas Argentinas.

La Justicia destacó que la mujer habría utilizado el celular de su hija con un chip cambiado y un distorsionador de voz para provocar la intimidación. 

"Decile al capitancito que le pusimos tres bombas en el Miami. Que se deje de joder con la política y chequee el avión porque van a volar en mil pedazos", dijo en la amenaza telefónica. 

Los motivos 

Además, la investigación detalló que Carbone habría hecho la intimidación para perjudicar a uno de los tripulantes de cabina, con quien habría mantenido un vínculo amoroso hasta que el hombre decidió cortar la relación. 

En este contexto, fuentes judiciales destacaron que la llamada fue hecha el domingo 21 de mayo por la mañana, cuando el avión AR1304 de Aerolíneas Argentinas se encontraba cercano a despegar desde Ezeiza con destino a Miami, con 270 pasajeros a bordo. 

El incidente provocó la evacuación preventiva de la aeronave y una demora de siete horas para los pasajeros. La empresa estima que las pérdidas por la amenaza superarían el millón de dólares. 

Quién es Carbone

Por otra parte, la investigación de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) determinó que Carbone había sido la culpable de la intimidación. La Unidad Operacional Antiterrorista de la PSA detuvo a la azafata el mismo día por la noche, cuando volvía de su último vuelo de rutina. 

Asimismo, la PSA confirmó las sospechas que pesaban sobre la mujer cuando accedieron a sus teléfonos personales, un Iphone 12 Pro que estaba en su casa y el 13 Pro que utilizaba para trabajar. En los celulares se encontró información sobre búsquedas de distorsionadores de voz online y si se podía peritar un audio alterado para ver a quién pertenecía la voz. 

La mujer permanece detenida por orden del juez, Federico Villena, por los delitos de “intimidación pública y entorpecimiento de los servicios públicos" y por "coacción agravada" contra el piloto por enunciar el conocimiento de la ubicación del colegio de sus hijos.