PASO en CABA: la CNE denunció que el voto no cumplió con las condiciones de seguridad

La jueza federal con competencia electoral de la ciudad de Buenos Aires (CABA), María Servini, indicó su preocupación por "el grado de improvisación" en el manejo de las máquinas de votación electrónica para votar jefe de Gobierno y cargos locales. 

Luego de varias denuncias por demoras y máquinas con fallas, la Cámara Nacional Electoral (CNE) confirmó que el horario del cierre de mesas en la ciudad de Buenos Aires se extendió hasta las 19:30 para aquellos que llegaron a la fila hasta las 18:00.

En este marco, Servini alertó sobre la "impericia nunca antes vista en la organización y ejecución de un proceso electoral", y responsabilizó a la empresa prestadora del servicio de Boleta Única Electrónica (BUE).

La denuncia de la CNE

Debido a esta situación, la Cámara Nacional Electoral publicó un comunicado denunciando que "el mal funcionamiento [de] las máquinas de votación de la elección local" no interrumpa la PASO nacional "quedando bajo exclusiva responsabilidad del [Instituto de Gestión Electoral] y de la empresa contratada, las consecuencias [para la ciudadanía] de la situación generada".

Además, las autoridades de la CNE agregaron: "La Cámara Nacional Electoral ya tiene dicho que la implementación de tecnología en el sistema de votación requiere que se cumplan, para la tutela de los derechos de la ciudadanía, condiciones de seguridad y auditoría indispensables cuyos componentes centrales fueron delineados hace ya varios años (2016) por este Tribunal, en ocasión de producir un documento específico".

Y completaron: "Como allí se estableció, una de las condiciones indispensables para la incorporación de tecnología al sufragio, requiere el diseño y ejecución de un exhaustivo e integral plan de auditorías (incluyendo componentes de hardware, software, código fuente, infraestructura de redes, entre otros), con intervención de la totalidad de los sujetos calificados -de orden técnico y funcional- en cada etapa".

El comunicado de la jueza

"Resulta preocupante el grado de improvisación con que se han manejado tanto la empresa contratada para la provisión e instalación de las máquinas de votación, como el propio Instituto de Gestión Electoral de CABA, evidenciando una impericia nunca antes vista en la organización y ejecución de un proceso electoral, en entidades que parecen más preocupadas por analizar lo que demora cada elector en votar, pretendiendo inventar mecanismos para que pueda haber dos electores votando a la vez en cada mesa, en lugar de gestionar eficientemente los recursos para que los electores puedan votar" advirtió la jueza.

Además, Servini especificó que hubo inconvenientes con 240 máquinas habilitadas para los electores porteños. En algunas sedes, agregó, las máquinas llegaron horas antes del inicio de los comicios, en otras "no habían sido conectadas ni probadas", o la instalación fue defectuosa.

"Se estima que aproximadamente un 30 por ciento de las máquinas estarían en esa situación", detalló.