La compañía Mirage Ubisoft presentó en sociedad el nuevo capítulo de la mítica saga de videojuegos Assassin’s Creed. Se viven días de excitación en la industria del videojuego por la presentación de Assassin’s Creed Mirage. La franquicia se encuentra en un momento particular: Valhalla le dio forma a la idea del juego como servicio pero en el camino dejó los elementos que le dieron a la serie la identidad que la volvió popular.
Assassin’s Creed Mirage, un regreso a las raíces
El primer juego de la serie presentaba una jugabilidad signada por el sigilo. La exploración y el combate fueron ganando terreno con el tiempo casi hasta convertirlo en un juego distinto. La actualidad de Assassin’s Creed los tiene como prestigiosos juegos de mundo abierto, acción y toques de RPG, pero aquel rasgo identitario de la infiltración es el que Mirage viene a recuperar. Por un lado tenemos la ambientación: Bagdad en el Siglo IX. Por el otro, tenemos la confirmación de que el personaje principal, llamado Basim, tiene un vínculo directo con la historia macro de la franquicia, ya que quienes jugaron Assassin’s Creed Valhalla lo habrán conocido como uno de los mentores de Eivor. Por el otro, la confirmación por parte de Ubisoft que el juego dejará la acción y RPG de lado para hacer foco en el sigilo.
El futuro es prometedor, con Infinity a la cabeza
Otro de los rumores más resonantes en la industria tiene que ver con la idea de Assassin’s Creed como plataforma de servicios cuyo nombre clave se conocía como Infinity. Ubisoft salió a confirmar estos rumores presentando Assassin’s Creed Infinity, producto al que la compañía francesa definió como una “plataforma base” que reunirá todos los próximos juegos de la saga. Allí se desarrollará la narrativa de la franquicia. Entre los juegos que llegarán se encuentra uno muy esperado: el Assassin’s Creed centrado en Japón.