Los vestidos y diseños de Benito Fernández representan a Argentina en el mundo desde hace años. El diseñador ha trabajado con su marca de indumentaria para personalidades como Máxima Zorreguieta, Natalia Lobo, Tini Stoessel y Valeria Massa, entre otras.
En una charla con Agustina Kämpfer para Algo que contar, el modista y empresario comentó acerca de su camino personal hacia el éxito en la industria y de los motivos que inspiran sus trabajos actuales.
Al repasar momentos importantes de su carrera en la moda, Benito consideró: "si tengo que rescatar un vestido, más que los que hice a Priscila Presley, o Máxima, el de Natalia Lobo es el que representa mi marca y la identidad latina". El vestido fue confeccionado como parte de una colección y seleccionado para la actriz en la entrega de los premios Martín Fierro en 2009.
"Fue un escándalo nacional, el vestido recibió unas críticas tremendas en la televisión. Que era un disfraz con esos pompones de lana. Había un prejuicio de que para ser elegante había que tener un rodete, un collar de brillantes, un corset y ser europeos. Para mi, al principio, fue muy duro y para Natalia también, aunque había sido la más elegante", recordó.
El desafío a los prejuicios había sido parte de la vida de Benito antes de volcarlo en su profesión. Primero fue por padecer dislexia, por lo que tuvo que "enfrentarse a la mirada de otros y la mirada de uno".
"Fue muy difícil, por eso yo digo que me tuve que reinventar solo. Lo mío empezaba en que al leer mal, escribís mal, y al escribir mal haces todo mal. Era una realidad", reflexionó.
Y continuó: "Tuve que reinventarme, ver qué me pasaba con mis relaciones, con mi carrera. Eso me llevó a esto, a que no me importara el prejuicio, por más de que eso me haya dolido".
Ahora, consagrado como uno de los diseñadores más importantes del país, propone ver a la moda en su vínculo con lo social: "A mi me gusta que me elijan, y sobre todo me gusta vestir mujeres de hoy; mujeres que luchan por sus derechos. Más allá de la belleza, de lo famosa, mi marca tiene que ver con esa amplitud de ver lo que nos pasa. La moda representa rápidamente lo que pasa".
Los mandatos a través de las generaciones
Benito Fernández contrajo matrimonio con Victoria Durand y tuvo dos hijos en esa relación previo a declarar públicamente su homosexualidad. "Eso tiene que ver con los mandatos y creo que fue lo que menos sufrí. Por ahí fue peor la dislexia. Fue un proceso y lo difícil era más lo de afuera", contó al respecto.
Y resaltó: "Lo que pasa es que en mi generación todo se ocultaba; las ideas políticas, la sexualidad, los problemas familiares, los golpes. Entonces, eso fue lo más difícil. Es mucho más sano construir sobre la verdad que sobre el ocultamiento".
Por último, reflexionó sobre la posición de la masculinidad ante los debates abiertos gracias a los movimientos feministas:
"La mujer empoderada, que empezó a luchar por sus derechos, a decir las cosas, me ayudó a crecer mucho. Como persona que creció, de golpe, que tomó una dimensión tremenda. Los hombres nos tenemos que acomodar y dialogar un poquito más; a veces siento que hay un enfrentamiento que no nos ayuda mucho, y tenemos que hacer este proceso con todas las luchas que se están dando. A veces siento que estamos un poquito atrás".
Podés ver Algo que contar con Agustina Kämpfer de lunes a viernes a las 23.30 por la pantalla de IP.