Gimnasia-Boca: un hombre murió tras la represión policial

Un hombre de 57 años falleció y más de cien resultaron heridas luego de que la Policía bonaerense reprimiera el ingreso al estadio. El gobierno de la provincia de Buenos Aires pidió la remoción del responsable del operativo.

Un hincha de Gimnasia y Esgrima falleció y más de cien resultaron heridos tras la represión de la Policía bonaerense al inicio del partido ante Boca Juniors. La víctima fatal fue Carlos "Lolo" Regueiro.

El encuentro se interrumpió a los 10 minutos del primer tiempo por incidentes entre hinchas locales y la fuerza que dirige el ministro de Seguridad Sergio Berni. Luego de la represión, el funcionario responsabilizó al club por lo sucedido y apuntó a la sobreventa de entradas.

En contrapartida, el presidente del Lobo, Gabriel Pellegrino, aseguró que el estadio estaba habilitado para 30 mil personas y que se vendieron "3.254 entradas sobre 4.300 que nos enviaron ya que el resto eran socios". En tanto, remarcó que "es la Policía la que determina la cantidad de gente que entra".

"La gente quería entrar con los carnets en la mano y nosotros veíamos plateas vacías. Los que cerraron las puertas fueron los organismos de seguridad, la policía y el Aprevide", sostuvo el directivo del club.

El intendente de La Plata, Julio Garro, coincidió que Gimnasia "no tiene ninguna responsabilidad con lo sucedido", y consignó que "más de un centenar de personas fueron atendidas por las ambulancias del SAME". En tanto, el el titular del Aprevide, Eduardo Aparicio, justificó el accionar policial argumentando que "había como 10 mil personas en las afueras del estadio cuando las puertas ya se habían cerrado".

La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) lamentó la muerte de Regueiro y envíó "sus condolencias a familiares y seres queridos" a través de la red social Twitter.

Por su parte, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires repudió el accionar policial:

"Es inadmisible que anoche miles de platenses hayan tenido que vivir lo que vivieron y más aún, que se produjera el lamentable hecho de que César Regueiro perdiera la vida en el marco del encuentro", señala el texto difundido por la administración de Axel Kicillof.

Asimismo, se informó que el gobernador "instruyó al Ministro de Seguridad para que el Jefe del Operativo sea inmediatamente apartado" y para que "se pongan todos los elementos a disposición del fiscal que está interviniendo".

Represión contra los hinchas

El cierre de las puertas de acceso se produjo a las 20:45, 45 minutos antes del comienzo del partido. Socios y aficionados del Lobo con entradas en mano presionaron para ingresar y la policía intentó contener la situación, primero lanzando gases lacrimógenos y luego postas de goma.

Esto se prolongó durante más de media hora hasta que los hinchas reaccionaron a una presunta agresión de los policías contra una niña que esperaba para ingresar. Uno de los presentes resultó herido con una bala de goma en el pómulo derecho, mientras que a un camarógrafo del canal TyC Sports le dispararon tres veces.

Apenas iniciado el partido, el humo invadió el terreno de juego y afectó tanto a los hinchas que ya estaban en las gradas como a los futbolistas y cuerpo técnico, por lo que el árbitro Hernán Mastrángelo suspendió el juego.

Impedidos de utilizar las puertas de salida, quienes estaban en las tribunas intentaron retirarse por el campo de juego. Recién pudieron salir cuando las autoridades abrieron las puertas, una vez que los del exterior habían sido dispersados.