La Copa del Mundo trajo historias colaterales a los partidos que se disputan en Qatar. Una de ellas, es la de Juan Tomás Martín, un vendedor ambulante de perfumes que hizo cosas impensadas gracias a su parecido con Lionel Messi.
Martín se convirtió casi por casualidad en El Doble de Messi, no tanto por iniciativa propia sino por motivación de sus familiares y amigos. "Ellos me veían igual y siempre me decían que tenía que hacer algo con eso", comentó Juan a Sebastián Davidovsky.
La historia de El otro Messi
Al igual que el crack rosarino, Juan también es oriundo de Rosario, Santa Fe. El hombre trabajó toda su vida en la calle hasta que en 2013 cedió a la presión de su familia y amigos para que "hiciera algo" con su gran parecido con Messi.
"Me venían diciendo que era parecido a Messi desde el año 2005 y yo ni sabía quién era. En esa época vendía perfumes en la calle. No era futbolero y tampoco me gusta el fútbol", indicó Martín, que ya estuvo en Russia 2018 y viajó como invitado a Qatar 2022.
Internet y la fama
"Busqué en internet qué se podía hacer con esto y justo encontré un concurso de dobles en Colombia. Había que subir un video y el que tenía más me gusta se ganaba una entrada para ver a Messi en persona. Imité un comercial en el que Lio comía unas papas fritas. Lo mandé y salí tercero. Ahí me di cuenta de que esto de imitarlo podía llegar a funcionar", recordó Juan sobre su primera experiencia como imitador de La Pulga.
"Cuándo fui la primera vez a España me pagaron todo y no podía creer que estaba ahí por algo que no lo había buscado tanto. Nunca fue mi sueño ser doble de Messi y mientras me pasaba esto seguía estudiando psicología en la facultad", reflexionó.
Además, el rosarino también remarcó que sigue trabajando como vendedor y que alterna la actividad con la imitación. "Yo no vivo la vida de él. Ojalá pudiera vivirla pero esto es un trabajo. Cuando se termina vuelvo a mi negocio, a mi barrio, la gente y los proveedores. Cuando tengo que hacer algo de Messi me pongo la camiseta y por suerte ya no me da vergüenza; hago el trabajo y ya está", explicó.