Pobreza en Argentina: 6 de cada 10 fueron pobres en la última década
Durante los últimos diez años, 6 de cada 10 argentinos fueron pobres en al menos algún momento y 3 de ellos nunca dejaron de serlo. Además, en la actualidad 4 de cada 10 son pobres tanto por ingresos como por privarse de cuestiones básicas como el acceso a la vivienda, la educación, poseer de servicios básicos y/o tener empleo, entre otros. De este último punto, 1 de cada 10 pasa hambre de forma cotidiana.
Así lo determinó el informe "Radiografía de la pobreza en Argentina, ¡es urgente acortar distancias!", elaborado por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA, presentado en conjunto con Cáritas. El mismo investigó sobre los vaivenes económicos de la última década en el país y consignó que solo el 36,4% de la población logró mantenerse constantemente por encima de la línea de la pobreza mientras que el 29,6% fue crónicamente pobre. De esta forma, el 64% de los argentinos conoció la pobreza en algún momento.
"Un 60% de la población fue pobre en algún momento, alrededor del 30% lo fue de manera permanente mientras que solo 1 de cada 3 argentinos no conoce la pobreza. Hay que dar respuestas estructurales a esto, políticas de desarrollo a través de la educación, la salud, el empleo y el trabajo y también políticas activas que atiendan la pobreza estructural”, dijo Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social.
Pobreza e indigencia
El informe también detalló cuál sería la incidencia de la indigencia sin la existencia de la Asignación Universal por Hijo y otros planes sociales, implementados durante los últimos años. Sobre esto, el director ejecutivo de Cáritas Argentina, Nicolás Meyer, sostuvo: "La indigencia está en el 8,8%, pero sin la AUH sería del 16%. Por eso, esta presencia del Estado es tan necesaria, aunque el foco debe estar puesto en trabajo y en educación".
Además, el estudio indagó sobre la problemática del mercado laboral dado que desde hace más de una década solo 4 de cada 10 trabajadores tienen un trabajo digno mientras que el 60% de la población activa tiene un empleo precario, un trabajo de indigencia o está desocupado.