La inflación y la crisis económica que enfrenta Argentina tiene su impacto en el descanso de los trabajadores: cada vez es más difícil irse de vacaciones por los altos precios de los alquileres y pasajes.
"Está muy difícil irse de vacaciones porque la plata no alcanza para nada", afirmó Yanina Salas, enfermera de la ciudad de Buenos Aires.
En el video, el informe completo con testimonios.
Según relató Osvaldo Ventimiglia, comerciante de CABA, alquilar una casa en la costa argentina puede llegar a costar más 110 mil pesos. Mientras que Alan Gaszea, empleado, señaló que los pasajes en colectivo hasta ese destino pueden estar más de 20 mil pesos.
"Hoy en día con un alquiler, más lo necesario para poder vivir 15 días en el destino de vacaciones, necesitas 600 mil pesos", cuestionó Ventimiglia.
Por su parte, Salas indicó: "Trabajo en salud y los sueldos son muy malos. Es imposible vacaciones, en mi caso tengo que elegir entre irme de vacaciones o festejarle el cumpleaños a mi hijo".
Vacaciones en los barrios
Melina Zapata vive en la Villa 1-11-14 y afirma que vacacionar es imposible para su economía: "No me puedo ir, si nos vamos no podemos pagar el alquiler ni comer", dijo a IP Noticias y TLN.
"Nuestro verano es en el barrio. Armamos la pileta para pasar el calor, no tenemos otro recurso. Me gustaría irme de vacaciones, mi hija me lo pide y me angustia mucho porque los días de calor son agobiantes", sostuvo.
Y señaló: "Es muy triste que no tengamos cómo ir a pasar aunque sea un día a la playa. Las esperanzas no se pierden, a mi hija le digo que cuando menos lo imagine vamos a estar tocando el mar".
Piletas comunitarias
Sebastián Maidana vive en el barrio Illia del Bajo Flores y contó que la clave para pasar el verano es "compartir las piletas con los vecinos".
"Los vecinos comparten sus piletas, yo no tengo y me invitan a meterme. Nos ayudamos entre todos porque cuesta irse de vacaciones. Es importante refrescarse y pasarla bien con amigos", sostuvo.
"La gente ya no se va de vacaciones"
"No me puedo ir de vacaciones por la situación económica, está todo muy caro. Me gustaría poder irme, pero ni siquiera miré precios porque se que no está a mi alcance", dijo Leandro a IP Noticias y TLN.
Y remarcó. "La gente ya no se puede ir de vacaciones. Muchos vecinos antes se iban y ahora ya no pueden. Está muy difícil porque ahora es más importante poder llenar la heladera y comprar zapatillas para los nenes".