Las cuentas de Cristina Kirchner: el gasto social contra el de los sectores más ricos

Cristina Fernández de Kirchner abordó el problema del déficit fiscal durante su discurso en La Plata. Según planteó, el gasto de asistencia social ronda el 1,9% del PBI, mientras que los beneficios impositivos llegan al 4,6%.

La vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, dedicó parte de la clase que expuso en el Teatro Argentino de La Plata a abordar uno de los temas económicos centrales en la campaña presidencial: el déficit fiscal.

La discusión sobre el gasto del Estado ha sido uno de los ejes del discurso electoral de los candidatos de la oposición. Los programas de Juntos por el Cambio (JxC) y La Libertad Avanza ubican al déficit fiscal como única causa de la inflación y proponen solucionarlo eliminando el gasto social.

"Normalmente, cuando se habla de déficit fiscal empieza en lo que gasta el Estado. ¿Saben cuánto se gasta en lo que podría denominarse gasto social? 1,9% del Producto Bruto Interno (PBI). ¿Saben cuánto se gasta en materia de eximiciones, alícuotas quebradas, excenciones y sectores que no pagan impuestos? 4,6% del PBI", explicó la expresidenta.

En ese sentido, agregó: "Si revisáramos el gasto tributario que está en el Presupuesto de la Nación, promociones fiscales, eximiciones de impuestos, alícuotas quebradas, no tendríamos déficit fiscal".

Desigualdad en el esquema impositivo

A continuación, Fernández de Kirchner apuntó a la diferencia que existe entre el pago del Impuesto a las Ganancias para los trabajadores y para las empresas y sociedades que se benefician con el ajuste por inflación, reconocido por la ley 27430 en 2017 y modificado al año siguiente con la ley 27468.

"La alícuota de ganancias para un empleado de la cuarta categoría, sujeto por su nivel de ingreso a pagar Impuesto a las Ganancias, si no tiene deducciones, es del 35% todos los meses. Si tiene deducciones, puede rondar el 16%. Las grandes empresas pagan 2,45% de la alícuota por Impuesto a las Ganancias", señaló.

Siguiendo esa idea, cuestionó al "slogan del déficit fiscal" y señaló que "los políticos hacen cola para ir a plenarios de los empresarios a decirles cuánto le van a pegar a la gente, a cuántos van a echar, cuánto van a bajar".

"Tenemos que sentarnos en una mesa, en serio, a hablar de estas cosas, para ver cuánto pone cada uno. Porque si el que recauda, que es el Estado para hacerse cargo de las inversiones de educación, salud, infraestructura, etc., deflacta las ganancias e indexa gastos, va a haber un déficit fiscal crónico. También hay que simplificar tributariamente, es cierto; tenemos cientos de impuestos que pueden ser eliminados, algunos que demandan más gasto de papel y de trabajadores que lo que se recauda", planteó la Vicepresidenta.