Afganistán: reunión de urgencia del G7 convocada por Boris Johnson
La crisis en Afganistán es la protagonista de la reunión virtual de emergencia que celebran Alemania, Canadá, los Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido, los países más poderosos del mundo agrupados en el llamado G7, convocada por el Primer Ministro de Reino Unido, Boris Johnson, como presidente del grupo este año.
El encuentro tiene una agenda triple: cómo garantizar que la mayor cantidad posible de afganos puedan salir de Kabul y si Estados Unidos está dispuesto a quedarse más allá de la fecha límite original del 31 de agosto para la retirada de todas sus fuerzas; cómo se puede coordinar un programa de reasentamiento a mediano plazo; y finalmente, cómo alentar a los talibán a formar un gobierno inclusivo, incluso amenazando con sanciones o negando el reconocimiento.
Claves de la reunión del G7
Boris Johnson y Emmanuel Macron intentarán imponer una posición común con Joe Biden sobre una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que implique a los gobiernos de China y de Rusia para influir en el movimiento talibán y estabilizar la situación en Afganistán. China y Rusia no han expresado urgencia por reconocer a un nuevo gobierno islámico integrista, pero mantienen sus embajadas en Kabul.
El reto del G7 es unir a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad en una estrategia compartida. Y el instrumento que contemplaban desde el acuerdo de Donald Trump con el movimiento talibán en febrero de 2020, es la exigencia de un gobierno inclusivo que respete los derechos humanos y no albergue grupos terroristas, a cambio de su reconocimiento en el marco de la ONU.