Cristina Fernández de Kirchner: a 14 años de ser la primera presidenta elegida por el voto popular
El 28 de octubre de 2007 Cristina Fernández de Kirchner se convirtió en la primera presidenta electa de la historia argentina.
CFK, candidata del oficialista Frente para la Victoria, ganó en primera vuelta con un 45,29% de los votos y superó por más de 22 puntos de ventaja a Elisa Carrió (Coalición Cívica), que obtuvo 23,04%. Fernández estuvo acompañada en la fórmula vencedora por el mendocino Julio Cobos. En tercer lugar quedó Roberto Lavagna, con un 17,3 por ciento de los votos.
La candidata oficialista expresó al conocer su victoria que “el de hoy es el triunfo de todos los argentinos” y que quiere “convocar a toda la sociedad, porque un país no lo construye sólo un gobierno”. Su elección acentuó la tendencia de las “mujeres al poder”, en coincidencia con Michelle Bachelet en Chile y Angela Merkel en Alemania.
La primera presidencia de CFK
El primer mandato de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2011) se caracterizó por el fortalecimiento del Estado con gran reactivación económica, crecimiento de las exportaciones y alto consumo interno. También expandió la política de inclusión social iniciada por Néstor Kirchner, con importantes medidas como la re estatización del sistema jubilatorio, las leyes de Matrimonio Igualitario y una ley plural de Servicios de Comunicación Audiovisual. También sumó en la Asignación Universal por hijo de 2009, a las embarazadas a partir del tercer mes de gestación que estuviesen sin trabajo. En materia educativa inició el Plan Conectar Igualdad, con más de 3 millones de netbooks entregadas a los alumnos y escuelas públicas, con el objetivo de achicar la brecha social tecnológica. "Siempre va a faltar la victoria definitiva mientras haya un pobre en la Patria", es una de sus frases que refleja la política inclusiva encarada por su gestión.
La política económica de Cristina Fernández de Kirchner
La política económica de CFK continuó una línea expansionista basada en un aumento del gasto público para la redistribución. Durante este período, hubo un aumento de la industria debido a la inversión en materia local, con un 18% de crecimiento acumulado. Según datos de la ONU, Argentina llegó a ser el segundo país iberoamericano con mayor índice de desarrollo humano, luego de España y por encima de Portugal y Chile, en 2015. Las políticas económicas del período lograron que en el segundo mandato la Argentina estuviera con la paridad de poder adquisitivo más alta de América Latina, después de Chile. También se incrementó el PBI, de 329 a 548 millones de dólares, logrando la duplicación de la clase media en el país.