Femicidio seguido de suicidio en Cañuelas: 1 de cada 5 agresores se quitan la vida
La localidad bonaerense de Cañuelas fue escenario de un nuevo femicidio. Un hombre de 60 años, identificado como José Averio Naón, ingresó a la casa de su expareja María Alejandra Giménez en la noche del 22 de noviembre y la asesinó a ella, a su excuñado, hirió de gravedad a su hijo y se suicidó.
El femicida violó la restricción perimetral que le prohibía acercase a su expareja, quien previamente lo había denunciado por violencia de género. El asesino era un exmilitar que estuvo en la Guerra de Malvinas y tenía habilitación para portar armas.
En la vivienda también se encontraban la hermana de la víctima y sus hijas, a quienes el femicida no les disparó cuando se dio cuenta que su hijo, de 25 años, estaba herido y decidió quitarse la vida.
El caso está a cargo de la UFI N°2 de Cañuelas con la fiscal Norma Pippo, con las calificaciones de tentativa de homicidio, femicidio, homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género.
Violencia de género
María Alejandra Giménez y José Averio Naón fueron pareja durante más de 20 años y tenía un hijo en común. La mujer había decidido separarse hacía dos meses, para ponerle fin hostigamiento y la violencia de género a la que el femicida la sometía.
Giménez lo había denunciado por violencia de género y contaba con una prohibición de acercamiento de Naón tanto hacia ella como a su hijo. Sin embargo, el femicida la amenazaba por teléfono.
1 de cada 5 femicidas se suicida
Según estadísticas de La Casa del Encuentro, entre 2018 y 2020 hubo 872 crímenes de género contra mujeres, trans y travestis, y 159 de esos asesinos se quitaron la vida después de perpetuar esos delitos. La cifra indica que en el agresor se suicidó en el 18% de los casos, es decir, uno de cada cinco femicidas.
Otros datos indican que entre 2008 y 2017 fueron asesinadas 2.679 niñas, mujeres, trans y travestis en el marco de crímenes de género: 502 de los autores de esos femicidios se suicidaron.
En España, las estadísticas oficiales de 2019 muestran que uno de cada cuatro femicidas se suicidaron: el 25,5 por ciento. De un total de 55 femicidas, 14 se suicidaron mientras que un 5,5% tuvo intento de suicidio.
Ada Rico, titular de La Casa del Encuentro explica algunos de los posibles motivos que llevan a los femicidas a suicidarse:
“El agresor tiene una obsesión con la mujer a la que agrede, a la que considera un objeto personal, ejerciendo esa dominación hacia sus parejas, hijas e hijos con agresiones físicas, o con amenazas y descalificaciones, estableciendo una relación de dependencia, intentando cercarla en una red de control y sometimiento”, sostiene Rico, y suma: “En una última demostración de todo el poder que tiene sobre ella la asesina y un alto porcentaje se suicida. Su vida pierde sentido porque ya no hay objeto al que perseguir y se siente incapaz de enfrentar la realidad de ser un femicida. No por estar arrepentido, ni sentir culpa, ni por sentir temor a una condena social, o penal”.
Si vivís violencia de género o conocés a alguien que esté en esa situación llamá al 144