Perú: Pedro Castillo se defenderá en el Congreso de un intento de destitución

El Congreso de Perú citó al presidente Pedro Castillo para ejercer su defensa en la sesión en la que se debatirá un nuevo pedido de destitución en su contra. La cita será el 7 de diciembre.

El Congreso de Perú citó al presidente, Pedro Castillo, para el próximo 7 de diciembre para ejercer su defensa en la sesión en la que se debatirá un nuevo pedido de destitución en su contra.

El cuerpo legislativo aprobó la solicitud impulsada por la oposición. Se trata del tercer pedido desde que Castillo asumió la jefatura del Palacio de Pizarro. Sin embargo, el mandatario afirmó que "nada impedirá" que llegue al final de su período previsto. 

¿Por qué piden la destitución de Castillo?

El pedido de destitución contra Pedro Castillo es por parte de los bloques opositores y se justifica en la causa constitucional de incapacidad moral permanente para ejercer el cargo.

Dentro de las causas para justificar la permanente incapacidad moral se anotaron "sus vínculos cada vez más evidentes con graves actos de corrupción, incompatibles con el ejercicio de la presidencia de la República".

¿Qué necesita el Congreso para destituir al Presidente?

La solicitud deberá contar con 87 votos, de un Congreso unicameral de 130 representantes. Días atrás, el pedido de destitución obtuvo 73 respaldos, lo que quedó a tan solo 14 votos de lograr el objetivo de la oposición.

Cuando presentó el nuevo proyecto de vacancia, el legislador Edward Málaga logró 67 firmas. Necesitaba 52 para dar paso al debate de fondo.

Aún así, las bancadas de izquierda y sus aliados oficialistas parecen un bloque capaz de frenar la pretensión opositora, porque tuvieron 32 votos y 6 abstenciones, por lo que están a seis manos de impedir que la propuesta de vacancia llegue a los dos tercios.

La postura de Castillo

El presidente Pedro Castillo salió al cruce de la nueva avanzada opositora para destituirlo y afirmó que, pese a la "pretensión de algunos sectores políticos de intentar quebrantar el orden constitucional y la voluntad popular expresada en las urnas" nada impedirá terminar su mandato en 2026.

"No pasarán ni las actitudes antidemocráticas ni los intereses mezquinos y subalternos", aseguró y se mostró confiado en que "los sectores democráticos del Congreso, así como las fuerzas sociales, se pondrán del lado de la institucionalidad y la gobernabilidad".