El sharenting es una práctica que consiste en familiares adultos compartiendo imágenes y videos de menores de edad en las redes sociales. Se deriva del término inglés que une las palabras share (compartir), y parenting (criar). En la web, la vida de los niños se convierte en contenido compartido por sus padres a modo de fotos, reels, historias y cuestiones similares que muestran su vida cotidiana.
Este hábito también se generó en celebridades, que crean perfiles individuales de sus hijos y logran miles de seguidores en sus cuentas.
Por otro lado, organizaciones que protegen los derechos del niño advierten sobre los riesgos de distribuir este material en las redes.
Los peligros del sharenting
Subir imágenes y videos de menores de edad a internet no es peligroso en sí mismo, pero es muy importante comprender que pueden utilizarse para:
- Grooming
- Pedofilia
- Ciberbullying
- Robo de identidad
- Robo de datos personales
En este contexto, la carga de estos contenidos puede ser utilizado para realizar fraudes, actos delictivos y suplantación de identidad digital. También los menores pueden ser objeto de burla o acoso escolar por la viralización de algún contenido referido a su imagen.
"Las imágenes que subís a las redes sociales sin el consentimiento de tus hijas e hijos generan una huella digital que queda asociada a sus datos personales. Todo lo que publicás forma parte de la reputación en línea de los menores", se explica en la página del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
¿Qué dice la ley?
En nuestro país, la Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes prohíbe exponer, difundir o divulgar datos, información o imágenes en contra de la voluntad de las infancias y la de sus responsables legales.
Además, los servidores que almacenan la información de las redes sociales suelen localizarse en el extranjero, por fuera de la legislación nacional. Es por esto que existe el riesgo de que cada contenido compartido quede guardado en esos servidores y puedan ser utilizados con otros fines.
Por otro lado, los registros de los buscadores calculan que un menor de 12 años tiene aproximadamente 1.300 fotos de sí mismo en las redes sociales, que fueron compartidas por sus padres.
Cómo proteger a los menores
En este sentido, los especialistas coinciden en que el deseo y la voluntad de las infancias debe respetarse en todas las áreas. En la web, los padres deberían cuidar la reputación en línea de sus hijos, para minimizar el riesgo de exposición y viralización de cualquier contenido que pueda afectar su integridad.
Desde el apartado de ciudadanía digital responsable, seguridad, privacidad en internet y redes sociales, el Ministerio de Justicia brinda una serie de consejos para salvaguardar la integridad de los menores en la web.
Entre ellos, se indican:
- Tené en cuenta que una vez que subís imágenes o videos las mismas pasan del espacio privado al público.
- Configurá la privacidad y seguridad de tus redes para que solo las personas que vos autorices puedan ver lo que compartís.
- Recordá que las fotos de personas menores desnudas pueden ser utilizadas por redes de pedofilia.
- Leé los términos y condiciones de las redes sociales para enterarte qué hacen con las imágenes o videos que vos subís.
- Las imágenes o videos son datos personales y están protegidas por la ley 25.326.
- Las imágenes o videos que subís pueden guardarse en servidores que están fuera de Argentina y si necesitás borrarlas puede ser difícil porque no estás cubierto por las leyes argentinas.
- Cuidá la reputación en línea de tus hijas e hijos para minimizar el riesgo de exposición y viralización de todo contenido que incluya a menores.