Este viernes 3 de junio se cumplen siete años del surgimiento de Ni Una Menos, la consigna que partió como respuesta colectiva al femicidio de Chiara Páez y que desde 2015 nuclea al movimiento feminista en Argentina. Con motivo de conmemoración, ese día habrá una movilización nacional que reunirá una vez más a cientos de miles bajo la consigna "Libres y con vida nos queremos", en distintos puntos del país.
En este informe de IP Noticias distintas perspectivas confluyen para reflexionar sobre la conquista de algunos derechos y el impacto de Ni Una Menos. Dora Barrancos, socióloga e historiadora, rescata las caractéristicas del momento histórico en el que apareció la consigna:
"El avance de los feminismos en Argentina era muy notable. Además, coaguló en una serie de perspectivas formales, legales, muy impactante. Evidentemente había ahí una cuestión muy tensionante. Había una constatacion de femicidios incrementados al calor de su visibilidad, de poder expresarse conceptualmente como femicidios".
Familiares de víctimas de femicidios
Sofía Ibarra Rodríguez es militante feminista e hija de Beba, víctima de femicidio en mayo de 2019. "Antes de lo de mi mamá, no me había involcurado de lleno en el Ni Una Menos. La verdad es que era una simpatizante por ser mujer, pero después de lo que pasó con mi mamá, una lo vive de otra manera. Hoy no solo simpatizo sino que milito para que no vuelva a haber más Bebas", reflexiona.
Otro ejemplo de lucha es el del caso de Gabriel Ávalos, hijo de Inmaculada Concepción Núñez, también víctima de femicidio, plantea la dificultad de acceso a la justicia que experimentan las familias de mujeres asesinadas. Según relata, lo vivió específicamente al reclamar por la Ley Brisa, que reconoce el derecho de reparación económica para niñas, niños y adolescentes cuyos progenitores murieron a causa de violencia de género o de violencia dentro de la familia.
"No puedo acceder a la Ley Brisa porque el Estado me pide que yo presente el acusado y el procesado de quien asesinó o quienes asesinaron a mi mamá", señala.
En este sentido, Marcela Labozzetta, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), sostiene: "Hoy lo que se ve si escuchamos a la comunidad es descreimiento absoluto del sistema de justicia, falta de respuesta, problemas serios de acceso a la justicia, impunidad. Todo ese escenario tiene que ser escuchado. No podemos mantenernos impávidos, inmóviles frente a este diagnóstico. Necesitamos hacer un cambio".
Y agrega: "Que la Justicia no sea una herramienta de sostenimiento del statu quo, del estado de cosas que es desigual y violento para las mujeres, sino una herramienta de transformación y de reconfiguración social".
El impacto de Ni Una Menos
El surgimiento de Ni Una Menos en 2015 sentó las bases para una serie de conquistas sociales y de derechos alcanzados por los movimientos feministas en Argentina. Gran parte de ellos, como reconoce y enumera Marcela Labozzetta en el informe, se consolidaron en leyes pioneras para América Latina y el mundo.
En el mismo sentido, la importancia de la consigna sigue influyendo en los discursos y la conciencia colectiva: "Fue un impacto enorme que llegó para quedarse, aún pese a lo que vemos día a día que, en muchos casos, implica retrocesos o discursos contrarios o resistencias al avance de las políticas de género", destaca la titular de la UFEM.
Dora Barrancos plantea algo similar, y lo extiende a la dimensión internacional del fenómeno:
"La voz de orden #NiUnaMenos, el pañuelo verde y demás; tenemos ahí una semiología compacta de sentidos de enorme transformación que están impactando en otras sociedades. Estoy segura de que en este momento la tónica de las movilizaciones de las mujeres y las diversidades en America Latina constituye un desafío planetario", sostiene la profesional.
En relación a esto, Gabriel Ávalos plantea: "Hay que hacer un trabajo en lo que tiene que ver con hacer partícipes a los hombres. Explicarles el respeto. Un trabajo ahí, a nivel justicia y a nivel social también".
Sofía, por su parte, rescata: "A 7 años creo que hemos hecho grandes conquistas. Creo que hemos logrado ser escuchadas, que nos hemos hecho nuestro lugar en la sociedad. La gente ya sabe que el 3 de junio es el Ni Una Menos, el 8M las mujeres paramos. Creo que todavia falta conquistar puestos laborales, nos falta meternos de lleno en eso pero que son conquistas que no dudo que de a poco iremos obteniendo hasta obtener una igualdad".