CABA: continúa la toma en diferentes colegios en contra e las pasantías gratuitas
Alumnos de los colegios porteños Mariano Acosta de Balvanera, el Lengüitas de Palermo y la Escuela de Cerámica N°1 tomaron las instalaciones como medida de fuerza ante diferente reclamos como el rechazo a las pasantías gratuitas y el reclamo por la Ley de Alimentación Escolar.
Desde el Lengüitas, por ejemplo, rechazan la realización de prácticas laborales, la pérdida de contenido educativo, la "manipulación de información", los proyectos inconsultos, el recorte en la educación pública y exigen que se apruebe el proyecto de Ley de Alimentación Escolar que impulsa el Frente de Todos en la legislatura porteña.
Los alumnos de estos colegios secundarios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires pasarán la noche del 27 de septiembre en las escuelas. Como respuesta, el Ministerio de Educación porteño mandó mails a las familias para advertir que "si no retiran a sus hijos de la ocupación, serán responsables por los hechos y daños que pudieran ocasionar".
En el caso del Mariano Acosta, las advertencias pasaron a la acción: les cortaron la luz apenas se definió la toma y aparecieron mensajes intimidantes en los parabrisas de los autos de padres y madres. Además, hay versiones de que se habría pedido a las autoridades de los colegios una lista de los estudiantes que participen.
Los reclamos
Familiares de estudiantes del colegio Mariano Acosta señalaron que se les exigió firmar un papel sobre el protocolo antitomas. "Decidimos hacer guardia en la puerta y no firmar nada", contó una de las madres.
Isabella Spátola, coordinadora del centro de estudiantes, y Carla Andrade, la presidenta, explicaron los motivos del conflicto que tiene cuatro ejes de reclamos.
"El problema principal es por las viandas. Somos 850 pibes y nos llegan 180 viandas", dice Carla. Mientras que Isabella agrega: "Si no llegas antes del recreo a agarrar una vianda, te quedas sin desayuno si sos de la mañana o sin almuerzo si sos de la tarde".
"Reclamos por la calidad de las viandas. No tienen valor nutricional, son un sanguchito con muy poco queso y jamón. A veces una mandarina, otras una barrita de ceral. No es el valor nutricional que necesitamos para poder pasar tantas horas en la escuela", señala Spátola.
Otra demanda es por el sistema de pasantías: "Tienen dos salidas: al mundo laboral o acercamientos a estudios superiores. Concordamos en que tiene que haber pasantías, pero deben tener un marco pedagógico y no pueden ser obligatorias. Además deben ser pagas. No está bien que te manden a laburar gratis cuando sos menor de edad, para empresas amigas de Larreta", denuncian.
¿Qué dice el gobierno porteño?
La ministra de Educación de la ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, sostuvo que la escuela "está tomada por intereses partidarios" y culpó "al populismo".
Sin embargo, el vicerrector del colegio Mariano Acosta, Julio Pasquarelli, confirmó que el problema de los alimentos es real: "Los chicos reciben viandas que no son suficientes para jornadas extendidas de tres días de 8 a 19 horas".