Esta semana fue el estreno de “The Matrix Resurrections”, la cuarta película de una de las franquicias más icónicas de la industria del cine. La producción se posiciona como una secuela de la trilogía, esta vez dirigida por Lana Wachowski. El argumento dispara la búsqueda constante de la nostalgia como un guiño permanente a los fans que vieron el estreno de las primeras tres películas, hace más de una década. Sin lugar a dudas, el principal atractivo de “The Matrix Resurrections” es el regreso de sus protagonistas: Keanu Reeves como Neo y Carrie-Anne Moss como Trinity. Al igual que en la trilogía original, los sucesos de la película giran en torno a sus protagonistas y la conexión y relación que mantienen entre sí.
¿Cómo continúa la trilogía?
Quienes hayan visto y tengan fresca la trilogía original de Matrix, recordarán los hechos que suceden en el final de la tercera película y se estarán preguntando cómo comienza la cuarta película. Sobre esto, hay que decir que “The Matrix Resurrections” tiene un primer acto muy sólido. Esto logra explicar de manera consistente cómo la Matrix es traída al presente. No es lo mismo ver la trilogía de Matrix en los años de su estreno que en 2021 con todas las evoluciones tecnológicas y sociales que ocurrieron durante todo este tiempo. “The Matrix Resurrections” da en el clavo y la película y su universo se vuelve a sentir real. Más allá de los hechos que suceden en el film, una de las mayores virtudes que tiene es cómo logra expandir su universo con pequeños detalles que se prestan a debates profundos.
¿Cuáles son sus puntos fuertes y débiles?
No es ninguna novedad que la saga de Matrix permite estar horas debatiendo sobre filosofia, existencialismo entre muchos tópicos diferentes. “The Matrix Resurrections” no ignora esta faceta sino que la expande y profundiza convirtiéndola en uno de los puntos más altos de la película. Otros puntos a destacar son las referencias constantes de la película a la industria de los videojuegos como así también a la primera trilogía de Matrix ya que sus referencias son constantes y más de un fanático las celebrará. Sin embargo, no todo es color de rosas ya que “The Matrix Resurrections” también tiene sus puntos flojos que podrían ser las escenas de acción que parecen limitadas y pierden un poco la esencia de la trilogía original. Por otro lado, el humor que por momentos es muy acertado, también parece un poco excesivo sobre algunas temáticas específicas. En definitiva, la cuarta entrega de la saga es una buena película. Un gran regreso no sólo por lo que cuenta en sí misma sino también por las ramas que abre de su universo y podrían ser explotadas en futuras producciones. “The Matrix Resurrections” es una vista obligatoria para todos aquellos que hayan visto y disfrutado la trilogía original.
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