Italia se convirtió en el nuevo campeón de la Eurocopa, tras empatar 1 a 1 con Inglaterra en los 90 minutos y definir por penales.
El partido empezó cuesta arriba para el conjunto que dirige Roberto Mancini. Antes de los dos minutos de juego el lateral izquierdo Luke Shaw conectó un centro de Kieran Trippier y puso en ventaja a los locales con un tanto que hizo vibrar a Wembley. Pero en la segunda etapa Italia consiguió la igualdad a través de uno de sus puntos fuertes: el juego aéreo. El defensor Leonado Bonucci resolvió una serie de rebotes tras un córner a favor y selló el 1 a 1 a los 66 minutos de juego.
El marcador no volvería a alterarse ni en los minutos restantes ni en los 30 de prórroga, donde ambas selecciones intentaron tímidamente inclinar la balanza a su favor. En los penales el exarquero del Milan, Gianluigi Donnarumma, se puso el traje de héroe, le contuvo el remate definitorio al joven Bukayo Saka y puso a celebrar a los azzurri.