Después de los festejos por la Noche de Brujas, llega el Día de los Muertos, la festividad mexicana que lejos está de temerle a la muerte: una fecha que celebra la vida y el reencuentro con los difuntos.
Es una celebración ancestral del pueblo mexicano, que en 2008 la Unesco declaró como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Hace siglos, las mexicanas y los mexicanos se reúnen en sus hogares -y en cementerios- alrededor de altares repletos de flores de cempasúchil y velas aromáticas para reunirse con sus familiares fallecidos. La famosa película "Coco" resultó un buen muestrario de esta tradición.
En la época precolonial, los pueblos originarios organizaban fiestas que duraban un mes entero para guiar a los muertos en su recorrido al Mictlán, el inframundo de la mitología mexica.
Día de los Muertos en pandemia
Este año, la pandemia impuso un panorama distinto para los festejos. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador encabezó la inauguración de la ofrenda homenaje a las víctimas del COVID-19, que ya son más de 91 mil. Además, decretó tres días de duelo nacional, a partir del 31 de octubre.