Huracán Melissa deja un rastro de destrucción en el Caribe y golpea con fuerza a Cuba
El huracán Melissa continúa dejando una huella devastadora en el Caribe. Lo que comenzó como una tormenta de categoría cinco en Jamaica se convirtió en una fuerza imparable que avanzó con furia hacia Haití, República Dominicana y, finalmente, Cuba, donde tocó tierra con categoría tres, dejando a su paso un escenario desolador.
Hasta el momento, se reportan al menos 49 víctimas fatales, aunque las cifras podrían aumentar a medida que se restablecen las comunicaciones en las zonas más afectadas. En el este de Cuba, la región más golpeada, las lluvias torrenciales y los vientos —que alcanzaron los 295 km/h— arrasaron techos, escuelas, hospitales y redes eléctricas, dejando a miles de familias sin hogar ni servicios básicos.
“Sentí cómo el techo volaba y pensé que era el final”, relató una mujer desde Santiago de Cuba, una de las ciudades más castigadas. Como ella, más de 735.000 personas fueron evacuadas a refugios dispuestos por las autoridades, mientras los equipos de emergencia trabajan contrarreloj para asistir a las comunidades aisladas por el desborde de ríos y los deslizamientos de tierra.
En Jamaica, el panorama no es menos dramático: barrios enteros quedaron bajo el agua y se registran cortes masivos de electricidad. República Dominicana y Haití también sufrieron daños considerables, aunque en menor escala.
Por su parte, Estados Unidos anunció asistencia humanitaria para Jamaica, República Dominicana y Haití, pero excluyó a Cuba de los envíos de ayuda. En tanto, los meteorólogos advierten que Melissa, ya debilitada a categoría uno, se dirige hacia Bermudas, donde podría volver a intensificarse en las próximas horas.