El 2020 fue un año tan inesperado como eterno. De una intensidad inimaginable para cualquier posible pronóstico hecho en el brindis de 2019, los últimos 365 días pasaron tantas cosas que no hubo posibilidad de hacer planes.
Voló un chancho, empezó un Gobierno, pasó un verano y llegó una pandemia que el mundo nunca previó. Todo se detuvo y recién ahora parece que hay esperanzas de recuperar una normalidad o, como se dice, una "nueva normalidad".
Uno de los principales hitos de 2020 fue la muerte de Diego Maradona. El 25 de noviembre, a los 60 años, falleció el ídolo máximo del fútbol argentino y el deporte a nivel mundial. Desde Nápoles a Fiorito, el llanto y el lamento fue tan grande como la vida D10S.
La llegada del nuevo verano trajo buenas noticias: el 29 de diciembre empezó la vacunación contra el coronavirus en nuestro país. La Sputnik V arribó a suelo argentino y el personal de salud ya recibe pinchazos inmunizadores.
La frutilla del postre: el 30 de diciembre. Con 38 votos a favor y 29 en contra el Senado de la Nación convirtió en ley la interrupción voluntaria del embarazo (IVE).