Alberto Fernández: "Ha habido una enorme tergiversación de lo que dije"

El presidente Alberto Fernández advirtió que sus dichos sobre el fiscal Diego Luciani fueron tergiversados por haber sido tomados de una frase aislada. El jefe de Estado se refirió a la entrevista en la que se le preguntó por la seguridad de jueces y fiscales en referencia al fallecimiento de Alberto Nisman.

"Aparece el nombre de Nisman porque fue parte de la pregunta concreta. Y la verdad, la pregunta me sorprendió porque me pregunté: ¿Qué tiene que ver Nisman con todo esto? Yo no tengo ningún temor de que pueda pasar eso. Y el Gobierno, así como no opera sobre jueces y fiscales, les da seguridad a los jueces y fiscales", explicó el mandatario en diálogo con El Destape Radio.

En esa línea, Fernández apuntó que "el problema central" es que la respuesta que dio a la pregunta "pone en crisis un relato de muchos sectores del periodismo que insisten en decir que lo de Nisman fue un homicidio". Y agregó: "hasta acá, no hay ninguna prueba que diga semejante cosa".

La polémica en torno al Presidente fue generada a raíz de un fragmento de su participación en una entrevista televisiva en el canal TN. En ese marco, y alegando que "siempre está el recuerdo de Nisman", uno de los periodistas le preguntó qué pensaba al respecto del pedido que hizo la Corte Suprema para reforzar la seguridad de funcionarios judiciales. 

Ante esa interrogación, Fernández repuso: "Realmente, alentar la idea de que le pueda pasar al fiscal Luciani lo que le pasó a Nisman... Miren, hasta acá lo que le pasó a Nisman es que se suicidó. Hasta acá no se probó otra cosa. Yo espero que no haga algo así el fiscal Luciani".

A continuación, consideró que las argumentaciones de Luciani en la causa Vialidad contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner constituyen "un disparate" de "una debilidad jurídica asombrosa".

Juntos por el Cambio repudió la "amenaza" al fiscal 

A raíz de lo dicho por Alberto Fernández en la entrevista, Juntos por el Cambio difundió un comunicado en el que calificó las declaraciones como "una velada amenaza a la seguridad personal del fiscal federal".

"Exigimos que el Gobierno Nacional garantice en forma absoluta la integridad física de los jueces y fiscales que están llevando adelante las causas que involucran a la Vicepresidenta de la Nación. En la Argentina no puede haber más impunidad ni más muertos por razones políticas, ideológicas o por querer buscar el legítimo deseo de verdad y justicia" agregó al texto difundido la principal coalición opositora.

A la publicación del comunicado se sumó el repudio de referentes opositores como la exdiputada Elisa Carrió, quien planteó que se debe "prevenir que suceda algo grave con la familia de los fiscales y de todos incluidos". 

Al respecto se expresó, también, la presidenta del PRO Patricia Bullrich, quien sostuvo que denunciará al Presidente por "alentar un golpe a la Corte Suprema".

El Presidente denunció amenazas de muerte en su contra

Luego de advertir la tergiversación sobre lo que dijo, Alberto Fernández advirtió que recibió una amenaza de muerte y que presentó una denuncia ante la Justicia: "Recibí una amenaza de muerte y está trabajando la Policía Federal", aseguró. 

El mandatario señaló que "todos recibimos amenazas constantemente", pero se limitó a hablar en profundidad sobre el caso. "No puedo contarlo porque temo interferir en la investigación", rescató.