El Gobierno logró su dictamen del Presupuesto 2026 y busca aprobarlo en diciembre

En una ajustada votación dentro de la comisión de Presupuesto y Hacienda, el oficialismo consiguió este martes su propio dictamen de mayoría para el Presupuesto 2026, el proyecto económico más importante del gobierno de Javier Milei. La Libertad Avanza se impuso gracias al voto doble de su presidente de comisión, Bertie Benegas Lynch, luego de un empate con Unión por la Patria.

La intención del Ejecutivo es llevar el texto al recinto el próximo 10 de diciembre.

El dictamen que responde al Poder Ejecutivo obtuvo 21 firmas, con el apoyo del PRO, la UCR e Innovación Federal, aunque varios legisladores lo hicieron con disidencias parciales. En paralelo, se presentaron tres dictámenes de minoría, encabezados por Unión por la Patria, Encuentro Federal y el Frente de Izquierda, que cuestionaron duramente la orientación del plan económico oficial.

Desde el oficialismo, el diputado Julio Moreno Ovalle (LLA) defendió el texto asegurando que busca “equilibrio fiscal sostenido, desregulación del Estado y reactivación económica”. Sin embargo, las bancadas opositoras advirtieron que el proyecto profundiza el ajuste, recorta derechos y consolida un modelo concentrador.

El diputado Carlos Heller (UxP) fue contundente: “Este presupuesto consolida un Estado ausente y entrega la administración nacional a la discrecionalidad del Ejecutivo. Es una hoja de ruta del ajuste”. También denunció que el proyecto omite información clave, como los acuerdos financieros del gobierno con bancos y el swap con China, lo que calificó como una “falta de respeto al Congreso”.

Desde Encuentro Federal, Oscar Agost Carreño planteó un dictamen alternativo “más equilibrado”, que mantenga el superávit pero proteja la inversión social y educativa. En tanto, el Frente de Izquierda rechazó completamente el texto por “estar desfasado de la realidad” y “beneficiar a los sectores concentrados mientras se abandona al pueblo trabajador”.

El oficialismo, por su parte, celebró el avance y defendió su plan como “razonable y sustentable”. Sin embargo, dentro y fuera del Congreso crece la preocupación por el rumbo económico y la falta de consensos para una ley que, por su impacto, debería reflejar una mirada más amplia que la de un solo sector.