Comenzó la peregrinación a La Meca y Medina
Unos 60 mil fieles comenzaron el fin de semana la peregrinación anual a las ciudades de La Meca y Medina (Arabia Saudita) bajo un estricto control sanitario y de seguridad. Es la segunda vez que este evento religioso se celebra en medio de la pandemia. En lugar de los cerca de dos millones y medio de peregrinos que acudían a la peregrinación procedentes de todo el planeta en tiempos de "normalidad", este año solo se permitió a 60 mil residentes en el país y vacunados con la pauta completa poder entrar a las dos ciudades más importantes del Islam.
Para organizar este evento religioso anual y controlar el desplazamiento de una multitud, Arabia Saudita aplica una serie de herramientas tecnológicas de control. Además de la pulsera y "tarjeta de identidad" electrónica, el Ministerio de Peregrinación ha desarrollado numerosas aplicaciones de móvil que permiten a las autoridades controlar la ubicación y el estado de salud de cada uno de los peregrinos.
Número limitado de peregrinos
"Solíamos recibir a millones cada año, pero ahora estamos ante el desafío de proteger a este número limitado de personas", dijo al Omer. En 2020 Arabia Saudita solo permitió a 10 mil residentes hacer el hach, uno de los cinco pilares del Islam, y obligatorio para cada musulmán cuyas condiciones físicas y económicas se lo permitan. "El éxito en la organización de la peregrinación del año pasado y la disponibilidad de la vacuna animaron al Gobierno a permitir el hach a 60 mil en lugar de los 10 mil del año pasado", indicó Al Amer. El aumento de la cifra este año se debe al avance en el proceso de inmunización en el país que, con más de 22 millones de dosis administradas, asegura haber inoculado al menos con una dosis al 50% de su población de unos 35 millones de habitantes.
Unos 60 mil fieles comenzaron el fin de semana la peregrinación anual a las ciudades de La Meca y Medina (Arabia Saudita) bajo un estricto control sanitario y de seguridad. Es la segunda vez que este evento religioso se celebra en medio de la pandemia. En lugar de los cerca de dos millones y medio de peregrinos que acudían a la peregrinación procedentes de todo el planeta en tiempos de "normalidad", este año solo se permitió a 60 mil residentes en el país y vacunados con la pauta completa poder entrar a las dos ciudades más importantes del Islam.
Para organizar este evento religioso anual y controlar el desplazamiento de una multitud, Arabia Saudita aplica una serie de herramientas tecnológicas de control. Además de la pulsera y "tarjeta de identidad" electrónica, el Ministerio de Peregrinación ha desarrollado numerosas aplicaciones de móvil que permiten a las autoridades controlar la ubicación y el estado de salud de cada uno de los peregrinos.
Número limitado de peregrinos
"Solíamos recibir a millones cada año, pero ahora estamos ante el desafío de proteger a este número limitado de personas", dijo al Omer. En 2020 Arabia Saudita solo permitió a 10 mil residentes hacer el hach, uno de los cinco pilares del Islam, y obligatorio para cada musulmán cuyas condiciones físicas y económicas se lo permitan. "El éxito en la organización de la peregrinación del año pasado y la disponibilidad de la vacuna animaron al Gobierno a permitir el hach a 60 mil en lugar de los 10 mil del año pasado", indicó Al Amer. El aumento de la cifra este año se debe al avance en el proceso de inmunización en el país que, con más de 22 millones de dosis administradas, asegura haber inoculado al menos con una dosis al 50% de su población de unos 35 millones de habitantes.