Elon Musk es un millonario excéntrico que pareciera salido de una película de James Bond. El filántropo sudafricano amazó su fortuna tras la venta de Zip2 en 1999, una pequeña compañía que funcionaba como un Google Maps exclusivo para los medios de comuncación. 

Sus ideas gestaron empresas como PayPal, Tesla Motors, The Boring Company y Space X entre muchas otras. Esta última es la que está sacudiendo el mundo de la tecnología y el espacio.

Starlink propone lanzar 42 mil satélites en 10 años (ya hay 700 en órbita) para poder proveer Internet ilimitado: con este servicio, no existiría persona en el mundo que no pudiera acceder a la famosa nube.

Pero el problema de la constelación de Starlink es la congestión de satélites ya rondando en la órbita más baja de la Tierra. Los expertos advierten que las frecuencias de estos aparatos interferirán el estudio libre del cosmos, además de ser un peligro si llegaran a entrar a la Tierra en forma de basura espacial.