Mara Gómez es futbolista del primer equipo de Estudiantes de La Plata en la máxima categoría del fútbol femenino de Argentina. Antes de llegar a ese club se convirtió en la primera jugadora trans de la Primera División, cuando formaba parte del Club Atlético Villa San Carlos.
En diálogo con Agustina Kämpfer en Algo que contar, la deportista reflexionó sobre las dificultades que enfrentó para llegar a competir en primera y los debates actuales sobre la inclusión de personas trans.
"Me costaba mucho verme como una referente dentro de lo que es la sociedad, del colectivo, del deporte. Pero vi que hay una necesidad, que es la que yo tenía en la adolescencia. Pensar en quién me visualizo dentro del deporte, dentro del ámbito social. Porque era muy difícil ver una chica trans ocupando esos espacios", recordó.
Con respecto a su rol actual como referente para personas trans que buscan insertarse en espacios históricamente negados, aseguró: "El colectivo siempre ha tenido límites, ha tenido un techo para poder soñar o aspirar a más. El lugar donde estoy parada hoy representa un cambio, y genera la ilusión de decir 'si ella pudo, yo también puedo', ahora que hay un camino abierto".
El deporte como ámbito de contención
"Más allá de lo competitivo, el fútbol tiene un rol muy importante en la sociedad que es la contención social, emocional. Salva personas de un montón de situaciones", sostuvo Mara, pese a reconocer que fue víctima de distintas situaciones de violencia y agresión durante su carrera deportiva.
El 7 de diciembre de 2020, Gómez fue alineada en el equipo titular de Villa San Carlos en la segunda fecha del campeonato de la Primera División Femenina de Argentina. Tenía 23 años y su equipo debía enfrentar al Club Atlético Lanús.
"Ese día marcó un antes y un después, se rompieron paradigmas, se abrió la puerta a la inclusión y fue el día de la diversidad. Fueron muchas sensaciones hermosas. Solamente lo disfruté, no pensé en los puntos ni contra quién", rememoró en la entrevista.
A continuación, la delantera de Estudiantes dio su punto de vista acerca de las discusiones sobre la inclusión de personas trans en competencias profesionales. "Sea cual sea el deporte, es un derecho básico poder pertenecer. Y esta cuestión de ventajas o desventajas no está totalmente estudiada".
Y agregó: "Solamente las personas trans lo sabemos y lo sufrimos día a día por esta terapia hormonal, la contra-hormonización, que nos hacen cumplir las instituciones deportivas para poder participar".
En ese sentido, señaló que "hay que romper con esos dichos y con hablar constantemente de lo que se desconoce".
"Lo que la sociedad espera de una chica trans es que, si gana, poder criticarla y decir 'es un hombre, tiene ventaja, no debería pertenecer'. Y si no se destaca están ahí, pendientes, a ver qué es lo que hace o no. Si hubiera ventaja yo sería titular todos los partidos, sería goleadora de la liga, y si así fuere también está bien, porque yo soy una deportista que entrena de igual a igual con mis compañeras", reflexionó.
Asimismo, consideró: "Quiero romper con esta perspectiva constante de que el hombre tiene una ventaja. En realidad el hombre siempre tuvo un privilegio, de decir y de posicionarse en el primer lugar para dar una opinión. No solamente por encima del colectivo, sino por encima de la mujer también".
Consultada ante los desafíos que asumió desde su transición hasta su presente profesional, planteó que lo más difícil fue "superar cada etapa desde la adolescencia hasta el día de hoy".
"Pensar que cuando fuera grande quizás iba a terminar prostituyéndome, no cumplir ciertos objetivos, o el miedo a no vivir. Me enorgullece la fuerza que tuve para atravesar todo y hoy sentirme una persona muy fuerte, orgullosa y segura de mi misma", concluyó.
Podés ver Algo que contar con Agustina Kämpfer de lunes a viernes a las 23.30 por la pantalla de IP.