Murió el escritor de culto Carlos Busqued por un accidente doméstico
La noticia conmueve al pequeño pero intenso ambiente literario. Murió el escritor chaqueño Carlos Busqued, autor de “Bajo un sol tremendo” -una de las mejores,más viscerales novelas argentinas del siglo XXI. Desde su círculo íntimo familiar no se brindaron muchos detalles de la causa de este inesperado fallecimiento: apenas se habló de un “accidente doméstico” ocurrido en su departamento del barrio porteño de San Cristóbal.
Busqued tenía 50 años y había nacido en Roque Sáenz Peña, Chaco, pero era bastante cordobés -allí pasó buena parte de su infancia y primera juventud- y desde las últimas décadas, inevitablemente porteño. Es (el tiempo verbal aplica en este caso) un escritor de culto antes que pasión de multitudes y best seller. Sin embargo, su pequeña obra -la mencionada novela y una inquietante crónica sobre un asesino serial, “Magnetizado” de 2018- lo ubica en una categoría superior del cánon.
En paralelo a su producción literaria, o más bien como parte de ella, Busqued tenía una activa participación en Twitter que lo había convertido en una celebridad de la red social de las chicanas y los debates en loop. Desde su cuenta bautizada “Un mundo de dolor” (@carlosbusqued), descripta en su bio como “fantasías para ejecutivos. masaje birmano, chasca, paseo de émulos. asesinato, taxidermia y uso de títeres”, daba rienda suelta a una incorrección política evidentemente innata, y juguetona. Era ácido, ocurrente, contreras pero también, a veces, un niño provocador dentro de un cuerpo de adulto grandote. Era, por lo que se podía leer, amante de los aviones de guerra, el porno, la marihuana y de todo el tipo de basura pop que abunda en las “redes sociales”. “Aguante fingir tu propia muerte”, escribió en un tuit hace un tiempo. Desde ayer por la tarde cuando se conoció la increíble noticia, fue compartido cientos de veces a modo de homenaje. Seguramente a él le hubiera gustado generar este efecto.