El Gobierno Nacional conversó con representantes del Reino Unido para avanzar en la producción local de vacunas
La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, y la asesora presidencial, Cecilia Nicolini, participaron este martes de una videollamada con el ministro de Vacunación del Reino Unido, Nadhim Zahawi, y la ministra para Europa y las Américas en el Foreign Office, Wendy Morton. Las funcionarias conversaron sobre las posibles maneras de acelerar la provisión de vacunas, e "intercambiaron experiencias y buenas prácticas sobre la campaña de vacunación llevada adelante por ambos países". Por otro lado, también analizaron líneas de cooperación para profundizar la lucha contra la pandemia, el impacto en el sistema sanitario y la posibilidad de fabricación de vacunas a nivel local.
La ministra Vizzotti confirmó que la capacidad de Argentina de ser parte de la cadena de producción de vacunas ha sido "una decisión estratégica para favorecer el acceso de nuestra población y de la Región de las Américas a las vacunas" y detalló que las autoridades argentinas "continúan buscando más y mejores oportunidades para acelerar este objetivo". En este sentido, desde el gobierno británico se mostraron dispuestos a favorecer el contacto con la Universidad de Oxford y el laboratorio productor. Además, Zahawi y Vizzotti analizaron la actual estrategia de vacunación llevada adelante por el Reino Unido que implica espaciar la aplicación de las segundas dosis en hasta 12 semanas, lo que permitió combatir de manera más rápida y eficaz la propagación del virus en su país. Al referirse a la situación en nuestro país, el ministro británico afirmó que “la actual estrategia aplicada por Argentina es la correcta y la más efectiva para romper el vínculo entre infección y hospitalización”.
En tanto, Nicolini abordó la posibilidad de acelerar la provisión de vacunas por parte del Reino Unido así como trabajar en una profundización en la cooperación bilateral y Vizzotti remarcó la capacidad de aplicación del sistema de salud argentino para hacer frente a un escalamiento en la aplicación de dosis ante un eventual aumento de la provisión de vacunas. Al respecto, Gran Bretaña remarcó el compromiso del Reino Unido en direccionar a través del mecanismo COVAX el excedente de vacunas.