Héctor Oesterheld: a 102 años del nacimiento del creador de "El Eternauta"
El guionista y escritor Héctor Oesterheld nació el 23 de julio de 1919 en Buenos Aires, y fue el creador de El Eternauta, su obra cumbre, considerada uno de los emblemas más poderosos de la narrativa argentina en la segunda mitad del siglo XX. La historia de Juan Salvo -un viajero en el tiempo- y su protagonismo en la resistencia humana frente a una invasión extraterrestre a Buenos Aires, con notables ilustraciones de Solano López, trascendió los límites del cómic. Es un mito cultural con implicaciones sociales y políticas que atraviesa la historia argentina contemporánea: la idea de un hombre convertido en “héroe colectivo” y enfrentado a una maquinaria bélica terrorífica es la fuerza motora de un relato fascinante que mantiene su vigencia y atrae siempre a nuevas generaciones de lectores.
La agitación política de fines de los años '60 y sobre todo, la radicalización del movimiento nacional y popular de principios de los '70 -con el regreso de Perón como hito fundacional-, cambiaron el rumbo de la vida y obra de Oesterheld. En ese contexto, publicó por ejemplo 450 años de guerra contra el imperialismo junto a Leopoldo Durañona, uno de los discípulos de Breccia, a modo de serie gráfica en el periódico de la izquierda peronista El Descamisado. Su activa militancia en Montoneros además, lo había conducido a la clandestinidad: en ese estado escribió El Eternauta II. Ya no era el escritor que imaginaba aventuras, sino el que las vivía en carne propia.
La trama de esta segunda historia retoma el final de la primera, con Germán -él, en primera persona- encontrándose de nuevo con Juan Salvo, su mujer y su hija, y todos viajando súbitamente a un futuro en el que Argentina había sido arrasada por los extraterrestres. Algunos grupos muy reducidos de humanos subsisten en una nueva edad de piedra. El Eternauta, junto con Germán, intentará ayudarles a luchar contra los extraterrestres, gracias a nuevos superpoderes. La serie fue publicada por entregas en la revista Skorpio, durante 1976 y 1977, en un formato vertical. Desde la clandestinidad, Oesterheld entregaba los guiones en la editorial mediante terceras personas, o pasándose él mismo de incógnito, a horas intempestivas.
Secuestro y desaparición bajo la dictadura
En los peores momentos de la represión, Oesterheld fue secuestrado por un grupo paramilitar de tareas, el 27 de abril de 1977, presumiblemente en La Plata. Poco después, fue visto en el centro clandestino de detención de Campo de Mayo. Allí lo reconoció Juan Carlos Scarpatti, uno de los sobrevivientes de ese campo de concentración y exterminio que relató el encuentro en el documental H.G.O.: “Estaba muy golpeado y angustiado. Le pregunté qué le pasaba y me dijo que le habían mostrado las fotos de las hijas muertas”.
Oesterheld pasó también por el Sheraton, un centro clandestino que funcionaba en el interior de una comisaría de Villa Insuperable donde los militares habían llevado a varios intelectuales y artistas. Luego fue trasladado a El Vesubio, otro de los epicentros del horror, y después de eso ya no se supo de él. Desde ese momento continúa desaparecido, aunque como su personaje continúa vivo como viajero de la eternidad.