La vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, dedicó parte de la <a href="https://ipnoticias.ar/politica/19233-las-claves-del-discurso-de-cristina-kirchner-en-la-plata" target="_blank" rel="noopener noreferrer">clase que expuso en el Teatro Argentino de La Plata</a> a abordar uno de los temas económicos centrales en la campaña presidencial: el déficit fiscal.

La discusión sobre el gasto del Estado ha sido uno de los ejes del discurso electoral de los candidatos de la oposición. <a href="https://ipnoticias.ar/politica/19182-llao-llao-que-dijeron-vidal-larreta-milei-y-bullrich-ante-empresarios-en-bariloche" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Los programas de Juntos por el Cambio (JxC) y </a><a href="https://ipnoticias.ar/politica/19182-llao-llao-que-dijeron-vidal-larreta-milei-y-bullrich-ante-empresarios-en-bariloche" target="_blank" rel="noopener noreferrer">La Libertad Avanza</a> ubican al déficit fiscal como única causa de la inflación y proponen solucionarlo eliminando el gasto social.

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"Normalmente, cuando se habla de déficit fiscal empieza en lo que gasta el Estado. ¿Saben cuánto se gasta en lo que podría denominarse gasto social? 1,9% del Producto Bruto Interno (PBI). ¿Saben cuánto se gasta en materia de eximiciones, alícuotas quebradas, excenciones y sectores que no pagan impuestos? 4,6% del PBI", explicó la expresidenta.
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En ese sentido, agregó: "Si revisáramos el gasto tributario que está en el Presupuesto de la Nación, promociones fiscales, eximiciones de impuestos, alícuotas quebradas, no tendríamos déficit fiscal".

<h2>Desigualdad en el esquema impositivo</h2>

A continuación, Fernández de Kirchner apuntó a la diferencia que existe entre el pago del Impuesto a las Ganancias para los trabajadores y para las empresas y sociedades que se benefician con el ajuste por inflación, reconocido por la ley&nbsp;27430 en 2017 y modificado al año siguiente con la ley&nbsp;27468.

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"La alícuota de ganancias para un empleado de la cuarta categoría, sujeto por su nivel de ingreso a pagar Impuesto a las Ganancias, si no tiene deducciones, es del 35% todos los meses. Si tiene deducciones, puede rondar el 16%.&nbsp;Las grandes empresas pagan 2,45% de la alícuota por Impuesto a las Ganancias", señaló.
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Siguiendo esa idea, cuestionó al "slogan del déficit fiscal" y señaló que "los políticos hacen cola para ir a plenarios de los empresarios a decirles cuánto le van a pegar a la gente, a cuántos van a echar, cuánto van a bajar".

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"Tenemos que sentarnos en una mesa, en serio, a hablar de estas cosas, para ver cuánto pone cada uno. Porque si el que recauda, que es el Estado para hacerse cargo de las inversiones de educación, salud, infraestructura, etc., deflacta las ganancias e indexa gastos, va a haber un déficit fiscal crónico. También hay que simplificar tributariamente, es cierto; tenemos cientos de impuestos que pueden ser eliminados, algunos que demandan más gasto de papel y de trabajadores que lo que se recauda", planteó la Vicepresidenta.
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Cristina Fernández de Kirchner abordó el problema del déficit fiscal durante su discurso en La Plata. Según planteó, el gasto de asistencia social ronda el 1,9% del PBI, mientras que los beneficios impositivos llegan al 4,6%.

La Vicepresidenta abordó el déficit fiscal poniendo en comparación dos sectores opuestos.

Las cuentas de CFK: el gasto social y los beneficios impositivos

Las cuentas de Cristina Kirchner: el gasto social contra el de los sectores más ricos

Cada 24 de marzo se conmemora la recuperación de la democracia tras la dictadura cívico-militar que gobernó Argentina entre 1976 y 1983. El&nbsp;terrorismo de Estado produjo daños sociales, humanos y políticos que persisten en el reclamo por los 30.000 desaparecidos. Pero además,&nbsp;la política económica planeada y ejecutada durante ese periodo&nbsp;provocó consecuencias negativas que se extendieron por décadas.

Con la toma del poder por parte del dictador genocida Jorge Rafael Videla, las Fuerzas Armadas acapararon todos los poderes del Estado. En ese marco, la conducción del Ministerio de Economía quedó a cargo de&nbsp;José Alfredo Martínez de Hoz.&nbsp;&nbsp;El equipo económico se completó con&nbsp;Adolfo Diz&nbsp;en el Banco Central y&nbsp;Carlos Alfredo Rodríguez&nbsp;como jefe de asesores.

El 2 de abril de 1976, el ministro anunció su programa económico por cadena nacional. El plan se había puesto en marcha con leyes sancionadas desde el primer día del golpe, pero continuaría con&nbsp;un endeudamiento externo muy alto y&nbsp;reformas para desregular el cambio, el comercio exterior, precios y salarios.

<h2>Precios, comercio e inflación</h2>

La supresión de la intervención estatal en la economía caracterizó a las medidas inmediatas del gobierno militar. El fomento extremo a la "libertad de mercado" inició lo que se conoce como teoría política neoliberal.

Los precios se liberaron con la eliminación de controles y esto se&nbsp;complementó con la desregulación total de importaciones y exportaciones. También se suspendieron las negociaciones paritarias, lo que derivó en un desplome de los salarios.

Por otra parte, se suspendió el control de cambios debido a lo que Martínez de Hoz consideraba "una sobrevaluación del peso con respecto a la divisa extranjera".&nbsp;La industria nacional quedó relegada al segundo lugar en la competencia con productos extranjeros y los valores se dispararon.

Esto llevo a un descenso del PBI, que se había mantenido en estándares internacionales hasta el "Rodrigazo" de 1975. A partir de 1976, la participación de los ingresos en el producto pasó del 51% al 31%; en consecuencia,&nbsp;tanto el desempleo como la pobreza&nbsp;aumentaron.

La primera gestión económica de la dictadura finalizó en 1981 con una&nbsp;inflación acumulada del 9.092,9%, y un incremento del 744,8 en la cotización del dólar.

<h2>Endeudamiento y debacle financiera</h2>

La caída del sector productivo argentino también tuvo que ver con la reforma financiera que impulsó Martínez de Hoz.

La liberación de tasas de interés permitió que los bancos controlaran esa variable sin referencia estatal y generó un vuelco&nbsp;de capitales de inversión hacia el sector financiero. También se flexibilizaron controles contra la fuga de capitales y se promovió la estatización de la deuda privada.

En paralelo, la deuda del Estado en moneda extranjera aumentó un 364%, siendo el Fondo Monetario Internacional (FMI)&nbsp;uno de los primeros acreedores. Desde el final&nbsp;del gobierno de Isabel Martínez de Perón hasta el final de la dictadura en 1983, el endeudamiento aumentó de 7.800 a 45.000 millones de dólares.

El programa económico ejecutado por el gobierno militar que tomó el poder en 1976 generó daños que persisten desde la recuperación de la democracia. Cómo fue y qué resultados obtuvo el plan anunciado a una semana del golpe.

El programa económico de José Alfredo Martínez de Hoz generó daños que persisten desde la recuperación de la democracia.

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Cómo impactó el plan de la dictadura en la economía argentina