José María Di Bello es militante y activista por los derechos de las disidencias y la diversidad sexual. Formó parte de la organización y el impulso de grandes conquistas como la Ley de Identidad de Género y la Ley de Matrimonio Igualitario, entre otras.
Ahora, insiste en la necesidad de la reglamentación de la Ley Nacional de repuesta integral al VIH, hepatitis virales, otras infecciones de transmisión sexual y tuberculosis. En una charla con Agustina Kämpfer en Algo que contar, se refirió a la urgencia de avanzar con su implementación real.
"Estamos pidiendo la reglamentación de la Ley de VIH. Es urgente, como era que se sancionara, porque esta es una ley que salva vidas. Necesitamos que se reglamente rápidamente para que muchas personas con VIH y hepatitis virales crónicas puedan acceder a pensiones no contributivas. Son personas en extrema situación de vulnerabilidad, que no tienen con qué alimentarse y mantener sus tratamientos. Es fundamental para que logren su subsistencia", dijo sobre la normativa sancionada por el Senado a fines de junio de 2022.
La exposición pública de José María creció en 2010 con la sanción de la Ley de Matrimonio Igualitario, que le permitió casarse legalmente con Alex Freyre. Fue el primer matrimonio entre personas del mismo sexo en América Latina. "Los derechos que hemos conquistado en Argentina se fueron multiplicando por nuestra Patria Grande", consideró Di Bello en la entrevista.
Ante la consulta sobre la restitución de ese derecho, destacó: "Del matrimonio igualitario, yo me quedo más con la segunda palabra, porque la lucha era y es por la igualdad".
Resistencia al lenguaje inclusivo
El debate por el uso de lenguaje inclusivo se reanimó a mitad de año luego de que el gobierno de la ciudad de Buenos Aires anunciara la prohibición de su uso en las escuelas porteñas.
"Tiene que ver con algo que mueve en ciertos sectores de la política, de la oposición, de tinte conservador, de derecha y patriarcal. El idioma trae una gran preocupación por algunos cambios que hacemos, y las lenguas son lenguas vivas. El mismo Gobierno que está proponiendo sacar el lenguaje inclusivo de las escuelas es el que pone 'bus' y tantos otros términos en la vía pública", reflexionó José María.
A continuación, destacó que "el lenguaje inclusivo es el reconocimiento de las diferentes identidades". Y advirtió: "Cuando uno saca esa posibilidad, se desconoce que hay otres, que no se definen con la a ni con la o, ni como varones ni como mujeres".
Identidad de género
Dada su autopercepción de género por fuera de las categorías masculino-femenino, José María se define como persona no binaria. Al respecto del proceso que atravesó hasta llevar esa identidad, relató:
"Yo no quiero ser eso que pretenden que sea: el rol y estereotipo del varón. Tampoco quise ser una mujer, por lo menos no de lo que se espera y que es performativo culturalmente, que finalmente son categorías de opresión. Me fui dando cuenta de esto, peleé, y cuando empecé a escuchar a otras personas hablar de sí mismas, que les pasaba esto que me pasaba a mi históricamente, dije: 'esto es lo que yo siempre fui. Qué fantástico poder expresarlo, disfrutarlo, y vivir como quien soy'".
Al profundizar en el tema del reconocimiento a las identidades sexuales y de género, Di Bello advirtió sobre la persistencia de la violencia institucional y profesional: "Todavía existen terapias de conversión en el mundo. Es algo por lo cual luchamos desde todos los movimientos de diversidad y disidencia sexual", dijo.
Y agregó: "Están permitidas en países; en Argentina las hubo durante mucho tiempo y cada tanto se escucha alguna situación, pero se sanciona y no se permite. Le hacen pensar a la persona que tienen una enfermedad y que se puede curar", dijo.
Podés ver Algo que contar con Agustina Kampfer de lunes a viernes a las 23.30 por la pantalla de IP.