El Gobierno aumentó el impuesto a los combustibles y la nafta subió 6,5%
El Gobierno nacional dispuso un incremento de impuestos a los combustibles que permanecían fijos desde los periodos 2021 y 2022. Con esa actualización, se decidió postergar la correspondiente al ejercicio 2023; así y todo, la suba de precios en surtidores de la ciudad de Buenos Aires (CABA) rondó el 6,5% en promedio.
El decreto 107/2024 publicado esta madrugada en el Boletín Oficial establece que los próximos incrementos, correspondientes al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres del año 2023, se producirán a partir del 1 de marzo, el 1 de abril y el 1 de mayo. Afectarán a la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil.
Según especificó el Ejecutivo en el texto de la norma, el objetivo es "iniciar un proceso de regularización de los referidos incrementos remanentes", por lo que "resulta razonable diferir parcialmente sus efectos, así como los de la actualización correspondiente al cuarto trimestre calendario del año 2023".
En ese sentido, explica que "se han ido difiriendo sucesivamente, hasta diversas fechas, los efectos de los incrementos en los montos de los impuestos fijados" en la Ley N° 23.966, que establece el marco normativo para organizar los impuestos a combustibles líquidos y gasoil.
La suba acumulada desde diciembre supera el 100%
Tras oficializarse la decisión, el litro de nafta súper pasó de $699 a $744 y la premium, de $862 a $918, mientras que el gasoil súper subió de los $736 a $784 y el gasoil premium subió de $938 a $998 en estaciones de CABA. Algunas petroleras aumentaron en torno al 11%, incluso antes de la publicación de la norma.
De esta manera, las subas en combustibles al consumidor superan el 100% con los ajustes acumulados desde la segunda semana de diciembre de 2023. De acuerdo al esquema de ajustes mensuales fijado hasta mayo, se espera un incremento total cercano al 25%.
Además del vencimiento de normas que controlaban aumentos para mantener los valores en sintonía con la evolución del Indice de Precios al Consumidor (IPC), los precios son afectados por la devaluación del 2% mensual del dólar oficial fijada por el Banco Central, el incremento en el precio internacional del petróleo y el camino que propuso el Gobierno hacia la paridad de importación para el consumo interno.