Un año de coronavirus: la culpa no es del murciélago
Más allá de las distintas teorías, la que pisa más fuerte es que la pandemia por coronavirus tiene un origen zoonótico: es decir, que fue transmitida de animales a humanos.
Se cree que tanto esta como otras pandemias surgieron en un contexto de explotación animal y comercialización de animales silvestres. Cabe entonces preguntarse: ¿podría haberse evitado?
Para la abogada especialista en Derecho Animal, Angélica Miotti la clave del derecho está en la prevención: “Si hubiéramos respetado los derechos más básicos, leyes, constituciones y tratados internacionales no estaríamos en esta situación”, declaró a IP Digital.
¿Cómo seguir?
Hay quienes sostienen que la prohibición del comercio de animales exóticos no alcanzaría para que este tipo de enfermedades desaparecieran. Lo cierto es que la mala relación entre el ser humano, los animales y el medioambiente es la principal causa de estas pandemias. La culpa no es del murciélago, es de quien se lo come.