Milei y la promesa de dólares: ¿Un respaldo real o una ilusión para la campaña?
La visita de Javier Milei a Estados Unidos, en la antesala de unas cruciales elecciones legislativas, ha sido presentada como un “triunfo diplomático” por parte del gobierno de la Libertad Avanza. El presidente argentino aterrizó en Washington con la misión de reforzar la alianza con Donald Trump, un respaldo clave a solo 12 días de los sufragios.
La comitiva argentina, con figuras como Karina Milei, Luis Caputo, y la ministra Patricia Bullrich, se alojó en Blair House, la residencia oficial de huéspedes presidenciales de EE. UU. en búsqueda de una imagen cuidada y de alto perfil, con el objetivo de dar la sensación que Argentina está en el mapa de las grandes decisiones globales.
El esperado encuentro entre Milei y Trump, con un almuerzo y una agenda que promete ser “nutrida”, no incluye anuncios de peso. A pesar de la insistencia de Milei en hablar de “una avalancha de dólares” y la posibilidad de atraer inversiones en sectores como el litio, cobre, uranio y energía, la realidad es que no se espera ninguna concreción inmediata.
La llamada “alianza estructural” con Estados Unidos, que Milei vendió como un logro “impresionante”, se basa principalmente en un apoyo financiero condicionado, un préstamo que no resuelve los problemas estructurales de la economía argentina, mucho menos la inflación o el colapso social que enfrenta el país.
Si bien Milei no tiene horarios, el encuentro está pactado para cerca del mediodía, aunque todo dependerá de los tiempos del mandatario estadounidense, quien debe volver de Egipto. En este, participarían las comitivas de ambos países, y se espera que a las 13:45 sea la despedida de Milei a cargo de Trump.
A las 17 hay una ceremonia de homenaje a Charlie Kirk, el activista político de derecha que fue asesinado de un disparo. Aunque aún no se confirmó la participación del presidente argentino, se espera que a las 22 parta el vuelo que regrese al país con la delegación completa.