Lucas González: un testigo dijo que los policías nunca se identificaron y creyó que eran ladrones

Un joven que paseaba a su perro en la misma cuadra en que mataron a Lucas González aportó un testimonio clave: vio que los policías no se identificaron como tales e inclusive pensó que eran ladrones.

Un joven que estaba paseando a su perro en la misma cuadra en que mataron a Lucas González dijo que los policías nunca se identificaron y pensó que eran ladrones. El testigo también observó a uno de los agentes de la Policía de la Ciudad sin identificación, disparando sobre el auto donde viajaban Lucas y sus amigos. Según fuentes cercanas a la investigación, el hombre será clave en la causa porque además aportó un video que filmó con su celular unos 20 minutos después que se hicieron los disparos. 

¿Qué declaró el testigo?

El hombre, que es vecino del barrio, contestó la ronda de preguntas que le hicieron los fiscales, Leonel Gómez Barbella y Andrés Heim. Fuentes judiciales detallaron que el joven pudo ver desde unos 60 metros la secuencia en la que los policías sin identificación se bajaron del auto con chalecos negros luego de disparar contra el auto de los futbolistas. Luego, el testigo indicó que se acercó y vio como los agentes habían detenido a dos amigos de Lucas en el piso. La situación del auto y los disparos, hicieron pensar al hombre que los miembros de la Policía de la Ciudad eran ladrones. Según las fuentes de la investigación, el testigo tampoco oyó que dieran la voz de "alto policía", ni silbatos o sirenas, pero sí varios disparos realizados por uno de ellos, muy cerca del Volskwagen Suran donde viajaban los adolescentes. Todo indicaría que este policía sería el inspector Gabriel Isassi, uno de los tres detenidos junto al oficial José Nievas y al oficial mayor Fabián López. 

Los testimonios del vecino coincidieron con las declaraciones de los tres amigos de Lucas González que estaban con él al momento del asesinato. Estas declaraciones contradicen a la versión de los policías, que aseguraron haberse identificado con la voz de alto y utilizaron la sirena del Nissan Tiida de la Brigada, manejado por Nievas, con Isassi de acompañante y López en el asiento de atrás. Por el momento, la fiscalía espera los resultados de los peritajes balísticos de las armas secuestradas a los agentes y de un plomo extraído del cráneo de la víctima. 

La declaración de los padres de Lucas 

Los padres del futbolista juvenil asesinado se presentaron a declarar en la sede del Ministerio Público de CABA, en Tucumán 966. Gregorio Dalbón explicó a la salida que "contaron lo que pasó el día en el que balearon a su hijo". Además, el letrado defensor agregó que "fue una declaración típica que se hace a las víctimas, lo hicieron bajo juramento de ley. Contaron lo que pasó ese día de forma muy emocional, fue muy fuerte. Contaron quién era Lucas”, agregó el representante legal de la familia González. Luego habló el padre de la víctima, que explicó haberse sentido "muy cómodo" durante la ronda de preguntas de los fiscales Barbella y Heim. “Le relaté mi vida habitual normal desde el momento en que Lucas se fue de la casa. Yo estaba haciendo un tratamiento de rehabilitación y se me vino esta tormenta, esta pesadilla de la que no me puedo levantar. Todavía pienso que me voy a levantar y que todo esto fue un sueño. Pero vamos a luchar para que todo se aclare”, indicó “Peka” González.

¿Cómo fue el asesinato de Lucas González?

El adolescente Lucas González volvía de entrenar junto con tres amigos en el barrio de Barracas. Todos se desplazaban en un vehículo particular, cuando fueron interceptados por agentes de civil de la Policía de la Ciudad en otro auto, sin identificaciones. Los testigos cuentan que, al verse intervenidos por un auto de civil, los jóvenes pensaron que los iban a robar y quisieron escapar. Mientras el vehículo de los adolescentes intentaba darse a la fuga, los agentes abrieron fuego y dos balas dieron en la cabeza de Lucas González, que iba en el asiento del acompañante. Producto de las heridas recibidas por los policías, González murió en el hospital El Cruce, de Florencio Varela. La familia denunció el caso de gatillo fácil y decidió donar los órganos de la víctima. "El corazón de mi hijo va a seguir latiendo", expresó la madre en declaraciones a la prensa.