Crimen de Lucas González: el problema de las brigadas
El ex ministro de Justicia y Seguridad porteño, Marcelo D'Alessandro, declaró como testigo en el juicio oral por el crimen de Lucas González, presuntamente asesinado en 2021 por efectivos de la Policía de la Ciudad.
Al finalizar la audiencia, el abogado que representa la familia de la víctima, Gregorio Dalbón, afirmó que el testimonio del ex funcionario fue clave para "esclarecer de qué manera trabajan las brigadas en la Argentina".
El letrado hizo referencia al accionar de los acusados, Gabriel Alejandro Isassi, Fabián Andrés López y Juan José Nieva, quienes persiguieron y dispararon al auto que conducía Julián Salas, amigo de Lucas, mientras actuaban en el marco de una "investigación encubierta".
En su testimonio D'Alessandro reconstruyó la cronología del caso y puntualizó en las "irregularidades graves" cometidas por los agentes de la fuerza policial que él dirigía en ese entonces.
"Cuando arranca el auto de Julián, empiezan a correrlo: D'alessandro explica que está prohibido perseguir a alguien sin balizas, sin sirenas, sin alertar que es la Policía. También está prohibido que el auto de la brigada no tenga patente en la parte trasera, y por supuesto que no podían tirar los policías", detalló Dalbón.
El foco sobre el funcionamiento de las brigadas
Organismos especializados en estudios de derechos humanos y violencia institucional, como el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) han cuestionado el funcionamiento de las brigadas policiales.
Según sus investigaciones y reportes, en muchos casos los efectivos que integran esas unidades "utilizan la posibilidad de no vestir uniforme" para "recorrer las calles para recaudar y regular de manera ilegal el delito", o bien "recaudar y extorsionar" a sospechosos o comerciantes.
La distorsión del rol policial fue expresada por dos testigos presenciales del asesinato de Lucas: tanto Julián como un vecino de Barracas que vio la persecución y los disparos declararon que los agentes no se identificaron y que "parecían ladrones".
Los efectivos Isassi, López y Nieva integraban la brigada 6 de la División Sumarios y Brigadas de la Comisaría Comunal 4 de la Policía porteña. Según indicaron en la etapa de instrucción de la causa, la célula actuaba en "investigaciones encubiertas que llevaban a cabo dentro de la villa 21-24".
Según consta en el expediente, ese patrullaje formaba parte de una operación ordenada por la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Delitos Vinculados con Estupefacientes (Ufeide). "Se trataba de un lugar de acopio de mercadería, era una causa de estupefacientes", afirmó Isassi ante la Justicia en 2021.
"Al momento de preguntar qué hacía la brigada ahí, me dijeron que estaban actuando en una causa, pero la fiscal actuante, de una fiscalía de la Ciudad, no dio la orden de estar ahí, en ese momento. Las cámaras y el geoposicionamiento mostraron que no actuaron de la manera que debería haber sido", remarcó D'Alessandro en su declaración.