Elecciones en Costa Rica: José María Figueres, el expresidente que busca un segundo mandato
El apellido Figueres está muy vinculado a la vida política de Costa Rica, y eso lo tiene muy claro José María (Partido Liberación Nacional), quien gobernó el país entre 1994 y 1998. Su padre, Jose Figueres Ferrer, fue presidente en tres períodos: en el gobierno de facto de la Junta Fundadora de la Segunda República (1948-1949) y en dos períodos constitucionales (1953-1958 y 1970-1974). Entre otras cosas, el político de origen catalán fue el responsable en 1948 de la abolición del Ejército, una de las particularidades que distingue a Costa Rica entre los países de la región.
Dentro del “figuerismo” hay que destacar a figuras como la exdiputada y exprimera dama Karen Olsen Beck (madre de José María) y dirigentes que abandonaron el PLN para formar el Partido de Acción Ciudadana (PAC), entre ellos el expresidente Luis Guillermo Solís Rivera (2014-2018).
José María es el descendiente del matrimonio Figueres-Olsen que llegó más lejos en la carrera política y que buscará el domingo 3 de abril volver a ser presidente, luego de obtener el 27,3% de los votos en la primera vuelta. Su contrincante en esta segunda vuelta es Chaves, el líder del partido Progreso Social Democrático (fundado en 2018), que pasó con el 16,7% de los votos.
Estudios en West Point y Harvard
El candidato Figueres Olsen es un ingeniero industrial de 66 años. Estudió en la academia militar estadounidense West Point (esto le valió muchas críticas debido al legado anticastrense de su padre) y los estudios de posgrado los hizo en la Escuela Kennedy de Administración Pública de la Universidad de Harvard. Antes de llegar a la presidencia, fue ministro de Comercio Exterior y de Agricultura en el primer mandato de Óscar Arias, que gobernó el país entre 1986 y 1990 (y que en 1987 recibió el premio Nobel de la Paz por su rol en los conflictos armados de América Central).
Tras ganarle la interna del PLN a Margarita Penón Góngora, primera dama durante el gobierno de Arias, Figueres Olsen ganó la elección del 6 de febrero de 1994 con el 49,62% de los votos (739 mil adhesiones) frente al candidato conservador Miguel Angel Rodríguez, que alcanzó el 47,7% del padrón electoral (en esos comicios la abstención fue de 19%), y con quien luego coincidiría en un escándalo político por denuncias de corrupción.
Durante los cuatro años que gobernó el país no escapó al aire de época que se vivió en los años noventa en América Latina y se plegó, en acuerdo con la oposición conservadora, a los lineamientos del Consenso de Washington, lo cual le costó críticas desde los sectores progresistas y de izquierda costarricenses.
En su gestión, al frente del gobierno liberó la banca, achicó el gasto público, privatizó servicios básicos, cerró el Instituto Costarricense de Ferrocarriles y el banco estatal más antiguo (Banco Anglo Costarricense) e impulsó la firma de varios tratados de libre comercio.
En esos años también mostró particular interés por las políticas ambientales y las tecnologías de la información, temas en los que seguiría profundizando luego de abandonar la presidencia. En los primeros años del 2000, a instancias de Kofi Annan, se sumó a un grupo de trabajo de Naciones Unidas sobre Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y fue nombrado director ejecutivo del Foro Económico Mundial, una institución que organiza, entre otras cosas, la reunión anual del Foro de Davos.
En esos años se sumó a la directiva de organizaciones ambientales internacionales como la Fundes Internacional (Fundación de Desarrollo Sostenible), el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) y el Instituto de los Recursos Mundiales (WRI), entre otras instituciones vinculadas a la temática.
Denuncias por corrupción: el caso Alcatel
En 2004, una investigación periodística reveló que Figueres Olsen había recibido 900.000 dólares de la compañía francesa de telecomunicaciones Alcatel. La corporación transnacional también fue acusada de sobornar al expresidente Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002) y a varios directivos del Instituto Costarricense de Electricidad.
Los ejecutivos de la compañía terminaron en prisión tras un juicio en Estados Unidos y Rodríguez también fue condenado por la justicia en primera instancia, pero luego fue absuelto. En aquel momento Figueres vivía en Suiza y el Ministerio Público inició una investigación, pero no logró avanzar por falta de pruebas. Una comisión parlamentaria que investigaba las denuncias convocó formalmente a Figueres para dar declaraciones, pero el expresidente se negó a comparecer por compromisos laborales.
Tras el escándalo político, Figueres Olsen se vio obligado a renunciar a su cargo en el Foro Económico Mundial, y las sombras de dudas sobre cómo fue la relación con Alcatel −su argumento es que trabajó como consultor, en un contrato privado cuando ya no ejercía ningún cargo público− lo acompañan hasta la actualidad. Hace cuatro años, en las negociaciones previas a la elección nacional, recibió críticas desde su propio partido por no aclarar suficientemente cómo fue todo aquel proceso.
“Un error mío de hace cuatro años fue no entrarle de frente a este asunto, como ahora le entro, con transparencia y claridad”, dijo Figueres en la entrevista televisiva que le hizo en enero el programa televisivo Mano a Mano. En su programa de gobierno, por ejemplo, el candidato del PLN incluye políticas de cero tolerancia a la corrupción y propone conformar una comisión de transparencia entre varios ministerios.
Los planes de gobierno 2022-2026
El programa de gobierno de Figueres se llama “La Vía Costarricense al Bienvivir”, se elaboró mediante una consulta virtual y tiene 170 páginas.
“Costa Rica siempre ha sacado fuerzas para dar los saltos más grandes hacia adelante. Nuestra historia así lo confirma. Después de la crisis de los 40 experimentamos treinta años de robusto crecimiento y progreso social, gracias a las valientes reformas de aquella época. Después de la crisis de los 80 fuimos capaces de acelerar reformas para profundizar la inserción de Costa Rica en la economía internacional. De la presente crisis saldremos también fortalecidos”, escribe Figueres en el documento.
El programa consta de dos partes, el llamado Plan 911 para la generación de empleo y los 12 ejes programáticos. El líder del PLN se comprometió a crear 200 mil oportunidades de trabajo directas y 40 mil oportunidades de trabajo indirecto en los primeros dos años de gobierno. Los doce ejes programáticos son Salud, Economía, Género, Ambiente y Energía, Seguridad, Derechos Humanos, Emprendedurismo, Política exterior, Cultura, Deporte, Educación y Reforma del Estado.